El juez Javier Cosentino dispuso la intervención, hasta el 10 de agosto próximo, de la empresa petrolera “Oil Combustibles”, tras detectar, entre otras cosas, que volvió a dejar de pagar el ITC (Impuesto a la Transferencia de los Combustibles) para “asistir” a otras firmas del Grupo Indalo, informó la agencia Télam. Sus dueños, los empresarios Cristóbal López y Fabian de Sousa, se encuentran detenidos.
Según el portal La Política Online, la intervención sería por 180 días basada en que los nuevos dueños del grupo (que en los papeles no lo son porque la justicia no aprobó la venta) habrían realizado retiros de importantes cantidades de dinero. “Existe una fuerte presunción de que durante el período postconcursal, la concursada ha incumplido con el pago del impuesto a la transferencia de combustibles con la finalidad de asistir a otras sociedades del grupo como venía haciendo con antelación al menos hasta diciembre de 2017”, sostuvo el juez.
Además, el magistrado podría inhibir a Marcelo Tinelli, el fundador de la productora Ideas del Sur. En los papeles el conductor le vendió toda la sociedad a López, pero nunca le habrían terminado de pagar el último porcentaje (19%). Esa operación se realizó en 2016 cuando la crisis en Indalo empezaba a avizorarse, y Tinelli intentó quedar desligados de los problemas de su ex socio.
El multimillonario empresario Cristóbal López, cercano al kirchnerismo, está en la cárcel desde diciembre, acusado de administración fraudulenta agravada, tras violar la inhibición de bienes a través de la venta de uno de sus grupos empresarios.
López fue procesado con prisión preventiva por administración fraudulenta tras haber evadido al fisco el pago de 8.000 millones de pesos en impuestos de la transferencia a los combustibles que su compañía petrolera Oil Combustibles recaudó, en calidad de agente de retención, a sus clientes. El ejecutivo utilizó ese dinero para financiar a otras empresas de su grupo.
El empresario posee negocios en medios, petróleo y el juego, un emporio que se potenció durante los gobiernos de los peronistas Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015). A Oil Combustibles, la empresa más importante del ahora llamado Grupo Ceibo, la AFIP le había reclamado una deuda de unos 17 mil millones de pesos por no haber pagado durante el kirchnerismo el impuesto a los combustibles.