Aníbal Fernández recibió un interrogatorio de parte de la madre de Florencio Randazzo cuando entró a la municipalidad de Chivilcoy, pago chico del ministro del Interior y Transporte, mientras visitaba la ciudad en el marco de su campaña electoral como precandidato a gobernador bonaerense
“Tengo que hacerle algunas preguntas, ministro”, escuchó el jefe de Gabinete de parte de Gladys, madre del hombre encargado de la “revolución ferroviaria”, en clara alusión al desplazamiento de su hijo de la precandidatura presidencial.
Aníbal, que es conocido por su verborragia y exabruptos, tomó de las manos a la madre del Ministro y le contestó muy calmado que Randazzo es el único responsable de lo que había pasado y solo a él había que achacarle lo sucedido.
Antes, durante su recorrida, Fernández elogió al hombre que no quiso competir por la provincia y prefirió retirarse. “Quiero que su pueblo sepa hay un hombre muy grande en su estatura política, que lo que le tiran, así sea un fierro caliente, lo agarra y no le tiene miedo a nada”, dijo el funcionario según el diario La Razón de Chivilcoy.
Esta frase representa un giro dramático respecto de la posición que adoptó el kirchnerismo después de que Randazzo rechazara ser candidato a gobernador. Aníbal fue uno de los tantos “sepultureros” oficialistas que cuestionaron al ministro.
A un costado. Randazzo estuvo meses haciendo campaña con el objetivo de ganarle a Daniel Scioli en las elecciones internas del FPV y ser el candidato del espacia pero, finalmente, la Presidenta decidió que sólo habría un candidato. Al Ministro le ofrecieron ser el único kirchnerista en la pelea por la provincia de Buenos Aires pero aun así prefirió bajarse de toda contienda.
Desde el momento en el que decidió no hacerle caso a Cristina, Randazzo dejó de encabezar los actos en cadena nacional junto a ella y por estos días su futuro como funcionario si es que Scioli llega a la presidencia es incierto.