Se cumplen 35 años de la Masacre de Trelew, en la que 19 presos políticos fueron fusilados cuando intentaron escaparse de la cárcel de Rawson. Para homenajearlos, este miércoles se realizó un acto en el ex aeropuerto de Trelew, donde se entregaron 19 de los 25 evadidos el 15 de agosto de 1972. El lugar se convertirá en el Centro Cultural de la Memoria.
El viejo aeropuerto fue transformado en un museo con las fotografías de los 16 jóvenes asesinados y los tres que sobrevivieron al fusilamiento, además de 19 árboles que simbolizan a cada uno de ellos.
"En este aeropuerto se entregaron a la justicia, el 15 de agosto de 1972, 19 militantes políticos fugados del penal de Rawson. El 22 de agosto de ese mismo año, 16 de ellos fueron acribillados en la Base Almirante Marcos A. Zar y otros 3 heridos de gravedad", resume la placa colocada en la ex sala de espera.
En el acto estuvieron el gobernador Mario Das Neves en compañía del secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde, junto con la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, familiares de los ex presos políticos y otras autoridades.
Por su parte, Alicia de Bonet, esposa de Rubén Bonet, uno de los guerrilleros asesinados, declaró este miércoles en Trelew en el marco de una querella que inició en febrero de 2006 junto a otros familiares de los fusilados, en la que esperan que la Masacre de Trelew sea considerada un crimen de lesa humanidad; es decir, imprescriptible.
Ayer, el secretario de Derechos Humanos Eduardo Luis Duhalde pidió la captura del capitán Luis Emilio Sosa, responsable de los hechos.
Sosa, un capitán de fragata retirado que cobra pensión militar, era jefe de la guardia de la base cuando los guerrilleros fueron ametrallados, según los testimonio que brindaron tres de ellos que sobrevivieron al ser dados por muertos.
Además, ayer se vivieron momentos más que emotivos, al recorrer el penal 300 ex presos políticos y dirigentes de organismos de derechos humanos.