La inesperada reunión que el gobernador electo de Corrientes, Ricardo Colombi, tuvo con Néstor Kirchner previo al inicio de sus encuentros con el Gabinete y la mismísima Presidenta fue llevada a la Justicia ayer por el radicalismo, cuyo titular, el senador Gerardo Morales solicitó ayer se investigue si el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, incurrió en el delito de coacción.
Según la presentación judicial, que recayó en el Juzgado Federal Nro. 5 del juez Norberto Oyarbide, Morales requiere saber Colombi " se habría visto forzado a asistir a la residencia de Olivos para entrevistarse con Néstor Kirchner, luego de lo cual habría logrado, efectivamente, tal como lo necesitaba, ser recibido en diversos despachos ministeriales".
En el escrito, la UCR denunció que "es público y notorio que el actual gobierno nacional utiliza los fondos públicos de manera absolutamente discrecional y que lo hace para cooptar voluntades de legisladores, gobernadores e intendentes" y sostuvo que "la disminución de lo que reciben por coparticipación y el aumento de las partidas discrecionales del gobierno, las torna dependientes del poder presidencial".
"En el caso [denunciado], la contraprestación que, al parecer, obtuvieron los Kirchner sólo por cumplir con sus obligaciones, fue el insólito apoyo de un gobernador electo por la UCR a la candidatura presidencial de cualquiera de los miembros del matrimonio", expresó Morales, quien solicitó citar a declarar a Ricardo Colombi y a varios periodistas cuyas notas sirven como prueba documental de la denuncia.