La Ciudad de Buenos Aires ya palpita las elecciones a jefe de Gobierno porteño, que por primera vez en una década no tendrá a Mauricio Macri entre sus aspirantes. Por eso, ni el precandidato del PRO Horacio Rodríguez Larreta ni el del kirchnerismo, Mariano Recalde, se quisieron perder la inauguración de la Escuela Técnica Universitaria, en Lugano.
Se trata de la primera escuela de su tipo que se instala en esa dependencia, y que está bajo la órbita de la Universidad de Buenos Aires. Se estima que en 2016 alcanzará una matrícula de 540 alumnos, pero la presencia de ambos precandidatos llevó el foco de atención a otro lado.
El acto lo encabezó el ministro de Educación Alberto Sileoni, junto al actual jefe de Gabinete porteño, ambos en representación del Gobierno de la Nación y Ciudad respectivamente. Recalde llegó escoltado por el ministro de Trabajo Carlos Tomada, quien será el primer candidato a legislador porteño por el Frente Para la Victoria.
El cruce entre ambos precandidatos era esperado. Antes de comenzar, se saludaron amablemente. "Vengo trabajando y viviendo en la Ciudad de Buenos Aires hace muchísimos años. Formo parte de un proyecto político colectivo y me ha tocado a mí encabezar una lista muy plural, muy diversa, con todos los actores que integran el Frente para la Victoria", precisó Recalde según consignó la agencia Télam.
El titular de Aerolíneas Argentinas calificó a las elecciones en la Ciudad como un "desafío" que "parece difícil pero que no es imposible", y que lo enfrentará "como encaramos cada uno de los desafíos que la Presidenta nos encomendó" durante los últimos años.
Para competir en las elecciones generales, Recalde deberá ganar la interna del Frente Para la Victoria, en la que se enfrentará, en principio, con el exjefe de Gobierno Aníbal Ibarra, la legisladora Gabriela Cerruti y el diputado nacional Carlos Heller.
Rodríguez Larreta, en tanto, parte como segundo en las encuestas en la interna del PRO, que lidera Gabriela Michetti. Allí también se inscribió el legislador Cristian Ritondo. El senador Diego Santilli, en cambio, decidió dar un paso al costado y trabajar para la candidatura presidencial de Mauricio Macri.