Gabriel Gandolfo y Nicolás Guzmán, los abogados que ejercer la defensa del empresario Lázaro Báez en la causa por presunto lavado de dinero, pidieron al juez federal Sebastián Casanello que averigüe si existe "una investigación paralela" sobre presunto lavado de dinero en su contra por parte de José María Campagnoli, fiscal del fuero ordinario y ex secretario de Seguridad del Gobierno de la Alianza.
Los letrados advirtieron que "de comprobarse ese desvío de poder" por parte de Campagnoli "podría aparejar importantes nulidades" por incompetencia: si Campangoli proveyó "medidas de prueba o diligencias administrativas" ello perjudicaría "la investigación que lleva adelante el juez Casanello" respecto a Báez.
Según información publicada por el diario La Nación, Campagnoli "requirió de oficio" la realización de "investigaciones y allanamientos en Santa Cruz", así como requirió a la Bolsa de Comercio "detalles sobre la composición de Helvetic Services Group".
Esa empresa poseería pisos en el edifico Madero Center, de Puerto Madero, donde funcionaban las oficinas de la financiera SGI, conocida como "La Rosadita".
La causa penal en que Báez figura de imputado de lavado de dinero, además, investiga al contador Leonardo Fariñas, que dijo haber transportado plata de Báez, y al ex financista Fernando Elaskar, ex dueño de SGI en "La Rosadita".
