La política no está de fiesta y aún no se toma vacaciones. El Gobierno nacional, encabezado por Cristina Fernández de Kirchner, impulsa y atiende en estos días una serie de cuestiones que pondrán en juego su capacidad para sortear crisis y su voluntad para abrir diferencias.
Entre los diez temas principales de las próximas semanas, aparecen conflictos desatados como gesta kirchnerista y juicios que se pueden transformar en un dolor de cabeza.
Fondos buitres. El viernes 28, Argentina se presentará ante el tribunal de Nueva York para tratar de cancelar el fallo del juez Thomas Griesa que la obligaría pagar sumas millonarias a bonistas que no ingresaron en el canje de la deuda externa.
Jubilados. La Corte Suprema tiene que decidir si extiende el fallo Badaro en la dimensión que reclama la Defensoría del Pueblo desde 2008, lo que implicaría un importante reajuste de los haberes de casi un millón de jubilados, algo que el Gobierno teme que lo lleve a un "déficit".
Saqueos. La ola de incidentes con episodios de robos a supermercados y comercios que desataron el jueves los hechos de Bariloche, prendió alarmas tanto sobre la presunta organización política de estallidos violentos como sobre la fragilidad de ciertos sectores sociales. La Presidenta aún no pronunció palabra alguna sobre el tema.
Apagones. Aunque las tormentas en el centro del país suelen ser un problema para los gobernantes locales (especialmente para el porteño Mauricio Macri y el bonaerense Daniel Scioli), los apagones y cortes de electricidad que acompañaron las lluvias de noviembre y diciembre, incluso en Navidad, apuntan al control sobre la gestión de servicios públicos del Gobierno nacional.
Ley de medios. Después del fallido 7D, y del breve festejo por el 14D, el jueves próximo, la Corte Suprema tendrá que definir si acepta el recurso de per saltum que solicitó el Gobierno contra la reposición de una cautelar sobre dos artículos de la norma, en el litigio con el Grupo Clarín sobre su constitucionalidad.
Boudou. Casi un año se va a cumplir del surgimiento del caso Ciccone y la situación judicial del vicepresidente todavía no se ha aclarado. En los últimos días, la Cámara Federal decidió que seguirá investigándolo a Amado Boudou y a sus socios por presunta su implicación en las maniobras que beneficiaron a empresas ligadas a la impresión de billetes.
Democratización de la Justicia. A la expectativa de lo que pueda suceder con la ley de medios y los reajustes jubilatorios, el kirchnerismo lanzó una cruzada para "democratizar" el Poder Judicial, de la que todavía no se conocen los límites ni propósitos, pero que ya genera polémica.
La oposición sindical. Los exkirchneristas Moyano suman cada vez más alianzas gremialistas, antes impensables, para sus decididos reclamos al Gobierno, como el relativo al impuesto a las ganancias y el salario mínimo. Además del respaldo en paros y manifestaciones de la CTA de Pablo Micheli, la CGT Azul y Blanca de Barrionuevo, y la UATRE del "Momo" Venegas, el líder de la CGT Azopardo compartió un palco con políticos opositores y recibió en medio de los saqueos un sorpresivo llamado de apoyo de su principal rival, Antonio Caló, de la CGT kirchnerista.
La Rural. En un giro inesperado, el mismo día de los saqueos en Bariloche y del fracaso de Boudou en la Justicia, el Gobierno salió anunciar la que parece será su gran batalla simbólica de las próximas semanas: la "toma de posesión" del predio de Palermo que compró la Sociedad Rural en los noventa. La medida genera críticas y adhesiones, y este miércoles desatará un nuevo paro ganadero.
2013. Aunque la jerarquía del kirchnerismo todavía no ha movido sus piezas para enfrentar un año electoral clave para su futuro, una de sus figuras con mayor proyección e imagen positiva, Daniel Scioli, ya está haciendo sus propias jugadas con la mirada puesta en 2015. El verano, con sus fiestas populares, probablemente será un tiempo de siembra de la próxima campaña.
