Un Alfredo de Angeli enfervorizado le pidió a los políticos “que nos devuelvan lo que nos sacan”, desde Concordia, Entre Ríos.
Habló de los sectores que apoyan la protesta, más allá de las retenciones como la citricultura o los camioneros. “Las familias de campo están resistiendo porque no se quieren ir a agrandar las villas miserias”, señaló.
“Cuando ellos se hacen presidente o gobernador, lo hacen para todos los ciudadanos. Queremos ser independientes, tener un sueldo, ganar bien y pagar nuestros impuestos como corresponde”, dijo.
Apeló a los jóvenes como hace habitualmente, dijo que “de ahora en más nos queda un deber que cumplir, defender la ciudad de Concordia y la patria”. No nos queda otra, tenemos que luchar, expresó, ante el aplauso de la nutrida concurrencia.
Hizo además el habitual agradecimiento “a los mayores” y “a las mujeres mayores” y recordó a su madre que lo llamó llorando. “Acá estamos nosotros y vamos a seguir luchando para tener una Argentina mejor, para que no haya pobres. El Gobierno nos quiere empobrecer, pero tenemos que tener paciencia y resistencia y pacificación del pueblo”.
Mientras tanto, su hermano Atilio hizo declaraciones a varios medios en donde se quejó de la falta de colaboración del Gobierno a la vez que dijo que a los pequeños y medianos productores “nos van a hacer desaparecer del mapa”.
“Se ponen en agresivos, nos ponen más duros a nosotros, nos quedaremos en las rutas y algún día nos llamarán y les mostraremos nuestra postura”, dijo. Y sostuvo que Florencio Randazzo “es un bruto entusiasmado” y sostuvo que siendo de una zona como Chivilcoy debería hablar con más conocimiento.