POLITICA

Los pilotos de Aerolíneas y Mariano Recalde se acusan mutuamente

Sigue la interna entre la aerolínea estatal y sus pilotos agremiados. La escalada verbal no se detiene.

Mariano Recalde, titular de la estatizada Aerolíneas
| Telam

Aerolíneas Argentinas salió con los tapones de punta a criticar a los dos principales dirigentes de las Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) a quienes calificaron de "verdaderos parásitos prebendarios que amasaron fortunas personales incalculables".

En referencia a los titulares de APLA, Jorge Pérez Tamayo y Pablo Biro, un vocero de la compañía, quien aseguró expresar la "indignación" existente en el Directorio de la empresa, agregó que eran "genuinos representantes del peor sindicalismo burocrático y prebendario".

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También le colgó a los gremialistas el cartel de "millonarios que se dedican tiempo completo a agraviar a la compañía, saboteando su buen funcionamiento" y los acusó de haberse "enriquecido" y de seguir "enriqueciéndose con privilegios y negocios paralelos a costa de la compañía y del Estado".

Según la fuente, a los directivos de la compañía de bandera les resultó "sospechosa" una seguidilla de "cartas agraviantes" dirigidas por los sindicalistas al titular de Aerolíneas, Mariano Recalde.

En esas cartas el presidente y el vice de APLA habrían comparado "injuriosamente" el gerenciamiento actual de la compañía reestatizada "con el verdadero vaciamiento y destrucción perpetrada por el Grupo Marsans, al que nunca le pusieron tantas trabas como las que nos ponen ahora a nosotros", dijo el vocero.

Hace unos meses, la propia presidenta de la Nación le había pedido a los gremios aeronáuticos que comprendieran la situación delicada de la compañía y en ese momento se había señalado que el motivo del disgusto presidencial era justamente el gremio de pilotos. En una carta pública firmada por Pérez Tamayo y dirigida a Recalde, el sindicato expresó su "profunda preocupación por el presente y el futuro" de Línea Aérea de Bandera como resultado de "ciertas decisiones" que "ponen en riesgo la viabilidad" de la empresa.

Pérez Tamayo señaló que la gestión al frente de Aerolíneas "no ha hecho nada para recuperar los destinos internacionales perdidos", entre los que mencionó a Madrid, Los Angeles, Nueva York, París y Londres. Además, el texto de la carta resaltó que "tal como sucedió a lo largo de la gestión Marsans, en los últimos meses se han comercializado pasajes en base a una programación de vuelos inviable con el único objetivo de hacer caja". "Como ciudadano, como trabajador de Aerolíneas Argentinas y fundamentalmente como Presidente de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas no puedo permitir que nuestra empresa caiga nuevamente en una espiral sin soluciones pudiendo dejar a más de 10.000 personas en la calle", advirtió el sindicalista.

En tanto, Diego Pérez Bariggi, prosecretario gremial de APLA, envió una carta documento al subgerente general de Aerolíneas, Axel Kicillof, en la que señaló que los contratos de leasing de dos aeronaves B735 "vencieron hace ocho y cinco meses", lo que implica "una penalidad del 50 por ciento del valor del mismo, es decir que mensualmente se gastan ciento 50 mil dólares por cada una de ellas".

En tanto, la fuente de Aerolíneas insistió en su dureza: "no pueden hablar en nombre de los trabajadores porque no son trabajadores. Estos señores, que se han enriquecido y siguen enriqueciéndose con privilegios y negocios paralelos a costa de la compañía y del Estado". Explicó además que se trata de "un gremio de élite, con empleados que ganan más que los gerentes de la empresa".

También señaló que "por eso indigna aún más la política de extorsión que llevan a cabo sus máximos dirigentes, verdaderos parásitos prebendarios que amasaron fortunas personales incalculables". Por último, consignó que le parecía correcto "que los pilotos ganen bien, por la calificación y responsabilidad de su trabajo".

Aunque añadió que "lo que no está bien es que los dirigentes de APLA sean millonarios que se dedican tiempo completo a agraviar a la compañía, saboteando su buen funcionamiento, con paros y ataques descabellados que comprometen la recuperación en marcha desde que fue nuevamente estatizada".