Pasaron casi desapercibidos en lo que parecía un mediático operativo de rutina: dos policías detenían en noviembre pasado a Leonardo Fariña frente a una decena de cámaras de televisión que cubrían la noticia que involucraba al sospechado "valijero" del empresario Lázaro Báez, imputado en la causa que investiga la denominada 'ruta del dinero K'.
Dos meses después, las imágenes cobran importancia judicial, pero no para el juzgado de Sebastián Casanello, sino para el del juez Luis Rodriguez quién investiga a su colega Norberto Oyarbide por presunto pedido de coimas a un empresario a cambio de frenar una investigación.
Es que según la denuncia efectuada por el financista Guillermo Greppi y su abogado Fernando Torres, el subcomisario que los allanó en medio de una investigación a cargo de Oyarbide les pidió 2.500.000 pesos en concepto de coimas para dar marcha atrás con la causa, en nombre del magistrado.
En su edición de hoy, PERFIL reveló que los testigos de ése allanamiento reconocieron a los comisarios denunciados en las imágenes televisivas del arresto de Fariña -luego sobreseído- por circular en una camioneta de alta gama con papeles sospechosos.
Distintos canales de noticias como Crónica TV, C5N y América 24 registraron el procedimiento. Sin darse cuenta, tomaron imágenes de los dos policías acusados en la denuncia por la supuesta coima pedida en nombre de Oyarbide. Los testigos consultados por este medio reconocieron al subcomisario Fabio Ascona y a su subordinado “Angel”, quien sería Angel Castro.