POLITICA
Que se doble, pero que no se rompa

Los radicales, más peleados y divididos que nunca

Los que querían una candidatura puramente radical piden la renuncia de la conducción oficial de la fuerza, que a su vez promete más purgas de "infieles" que adhirieron al kirchnerismo. Reclaman una "autocrítica".

default
default | Cedoc

Los variados sectores de la Unión Cívica Radical (UCR) agudizaron las disputas que tienen alrededor de las distintas visiones respecto al rol que le cabe al centenario partido en la actualidad, luego de las elecciones del domingo pasado, en las que no hubo ningún candidato radical a presidente y en la que los militantes de esa fuerza estuvieron dispersos en casi todas las listas principales.

Los radicales "R", o sea los que querían una fórmula puramente radical, exigieron la renuncia a la conducción del centenario partido, el radicalismo "L", por su alianza con Roberto Lavagna y pidieron que el la UCR se declare en "estado de asamblea permanente".

El sector que mantiene la hegemonía de las estructuras orgánicas promete más purgas a los radicales "K", a quienes califican de "infieles". Gerardo Morales, presidente de la UCR nacional y ex compañero de fórmula de Lavagna, adelantó que "tal vez" más gobernadores que adhirieron a Cristina Fernández de Kirchner serán expulsados del partido, tal como sucedió con Julio Cobos, gobernador de Mendoza y vicepresidente electo.

El mendocino, sin embargo, no se resigna a perder su condición de radical, y se manifestó a favor de la "recuperación" del partido del que fue expulsado y pidió una "autocrítica".

Todos contra todos. En diálogo con varios medios de prensa, Morales anticipó que en la tercera semana de noviembre la UCR realizará una amplia reunión en el Comité Nacional, a la que asistirán las autoridades electas y dirigentes de todo el país para analizar el camino a seguir.

"El radicalismo no se convertirá en una máquina de impedir. Dará batalla con un matiz propio", expresó frente al futuro gobierno. Evaluó que la elección del radicalismo "fue muy buena, pese a que esperábamos acceder al ballottage y obtener un triunfo, pero los 17 puntos logrados son muy importantes".

Sobre los 12 diputados que lograron obtener, destacó que "son radicales de paladar negro, no hay ninguno de los infieles", en referencia a los "radicales k". Criticó con dureza a Cobos, considerando que su expulsión del radicalismo "no tiene vuelta de hoja".

"Cobos está echado. Se le garantizó el derecho a defensa, no se le negó ningún derecho", dijo, sugiriendo que en las próximas semanas el partido comenzará a analizar sanciones para otros gobernadores y dirigentes que hayan adherido a la Concertación.

"Tal vez el gobernador de Río Negro Miguel Saiz sea el próximo, no sé. Eso no lo resuelvo yo, sino la convención partidaria. El partido debe ser intransigente, hoy más que nunca. Debe hacer todo con conducta, disciplina, ética y principios. No vamos a permitir que el radicalismo adopte acciones dispuestas por Kirchner a través de los gobernadores K", indicó.

Dijo que "los K deberán ponerse las pilas con la Concertación y trabajar ahí, lejos del radicalismo, que ahora deberá trabajar mucho para reconstruir su sistema partidario" y destacó que l os "tres mosqueteros radicales k perdieron: el mismo Cobos, Miguel Saiz y Daniel Katz".

Pero Cobos no está dispuesto a perder su condición de radical. "Vamos a apostar a la recuperación del radicalismo, a lo mejor para el caso de Mendoza no es el mejor escenario. Trabajamos con la firme convicción de que nuestro país necesita un radicalismo fuerte. El radicalismo tiene que hacer su autocrítica y de ahí en más entre todos tratar de sacar adelante este partido", señaló a la agencia oficial Télam.

Los radicales que querían una fórmula puramente radical y que están vinculados con el cómico y empresario Nito Artaza, f ustigaron duramente a la conducción partidaria encabezada por Gerardo Morales y Adolfo Stubrin. La línea interna de la UCR " Pensamiento y Acción" exigió su "inmediata renuncia por la responsabilidad" que les cabe en los resultados de los comicios celebrados el domingo pasado.

En un comunicado, reclamaron que se ponga a la UCR "en estado de asamblea permanente, con inmediata caducidad de las afiliaciones y abriendo una nueva etapa política para permitir la reconstrucción" del partido.

"Pensamiento y Acción" acusó a Morales y Stubrin de ser "los responsables de que la UCR por primera vez no tuviera candidato presidencial, haber violado la carta orgánica partidaria, forzado a la convención nacional", e "inventado un sistema de selección de candidato que la historia radical no registra", entre otras irregularidades.