Por estas horas, el designado ministro de Economía en la futura gestión de Cristina Kirchner, Martín Lousteau, es el hombre más buscado por los medios de prensa del país.
Desde las oficinas del Grupo Bapro que dirige el joven licenciado de 36 años revelaron a perfil.com que entre el día de ayer, y la mañana de hoy se recibieron más de 100 pedidos de entrevistas periodísticas, pero que por el momento, el sucesor de Miguel Peirano "no dará declaraciones, porque su tarea está abocada hasta el 10 de diciembre en el Banco (Provincia)".
"Ayer ya teníamos unos 50 pedidos, y durante esta mañana ya recibimos 50 más, que se fueron agregando a una lista interminable", aseguró a perfil.com una de las secretarias con acceso al despacho del ex asesor de Alfonso Pray Gay en el Banco Central.
Sin embargo, la sed informativa de los medios gráficos, televisivos y radiales, arrojaron a decenas de cronistas a la calle para obtener aunque sea una palabra de la boca del próximo jefe del Palacio de Hacienda.
En esa extenuante tarea periodística se logró una definición que anticipa cualquier reportaje. Lousteau dijo hoy sentirse "muy honrado" que la presidenta electa lo haya nombrado en Economía, pero evitó hacer otras consideraciones sobre sus futuras funciones.
"Es un honor muy grande el hecho de que la presidenta electa haya confiado en mí y mi equipo, pero hasta el 10 de diciembre tengo una responsabilidad institucional muy grande, que es conducir el segundo banco del país", dijo, en referencia al Provincia (BAPRO).
También recordó que "hay un ministro de Economía, que es Miguel Peirano, con el que tengo una gran amistad y un enorme respeto profesional por él, que es el encargado de conducir las riendas económicas del país".
Cuando los periodistas que montaban guardia en la puerta de su casa de Colegiales quisieron saber cuáles serían las primeras medidas que tomaría cuando asuma el cargo, el designado funcionario eludió con buenos modales la requisitoria: "Me voy a trabajar, les agradezco mucho", dijo sonriendo vestidfo con traje color negro y corbate verde agua.
Lousteau subió entonces al automóvil, con el que se alejó presuntamente rumbo a la sede del Banco Provincia, que encabezará hasta su asunción en Economía.
Fuente: DyN