Las obligaciones y dificultades que acarrea cualquier primer año de Gobierno no impidieron que los principales funcionarios porteños mantuvieran cuidados sus propios bolsillos. Desde el día que asumieron en diciembre de 2007 hasta el último día de 2008, el gabinete porteño incrementó en promedio su patrimonio un 32 %.
Sólo 3 de los 13 dirigentes de PRO que ostentan los máximos cargos públicos en la Ciudad no tuvieron ganancias de un año al otro: dos de ellos perdieron parte del capital que tenían y una ministra declaró que mantiene los mismos bienes que en 2007.
Más allá de la ideología y el proyecto de gestión, el equipo macrista tiene un rasgo en común: sus despreocupaciones económicas. Ocho de ellos son millonarios. Quien lleva la delantera en la carrera patrimonial es el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, con más de 39 millones de pesos.
Para realizar la comparación, PERFIL tomó el valor de los activos declarados en cada caso (inmuebles, vehículos, acciones, dinero que les deben) y los contrastó con sus pasivos, tales como deudas contraídas o créditos tomados. No fue tenida en cuenta la declaración jurada de 2009 de Hernán Lombardi, titular de la cartera cultural, por falta de datos.
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