En un día caldeado y que generó cruces entre Ciudad y Nación por el corte de la Autopista Illia, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, volvió a acusar esta tarde a la administración nacional de "marginar" a los ciudadanos de la Capital. En conferencia de prensa, Macri, aceptó abrir "el debate y la discusión" del aumento de los impuestos que presentó ante la Legislatura, tras el masivo rechazo de la oposición.
Así lo manifestó el mandatario comunal en una conferencia de prensa convocada tras la reacción de todos los bloques parlamentarios a la aplicación de tributos a las compras con tarjetas de crédito, contratos comerciales, alquileres, seguros, y la ampliación de Ingresos Brutos.
El mandatario comunal volvió a responsabilizar al gobierno nacional por la situación fiscal que atraviesa la Ciudad, al "haber marginado" a los porteños de "una enorme cantidad de recursos" para realizar obras, por la falta de autorización para obtener un préstamo internacional.
Mauricio Macri, la vicejefa Gabriela Michetti, y los ministros de Economía, Néstor Grindetti, y de Seguridad, Guillermo Montenegro, dieron una conferencia de prensa en la sede de la Comuna, en medio de una jornada complicada por el extenso corte de la Autopista Illia, el paro docente y varias movilizaciones por el Centro porteño.
Michetti aseguró que el macrismo tendrá "flexibilidad para debatir y si tenemos que cambiar, cambiar la propuesta" de presupuesto, que incluye los aumentos en tributos al consumo, que generaron un masivo rechazo desde el ámbito político porteño opositor, del kirchnerismo nacional, y hasta de la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.
El jefe de gobierno reconoció que "este es un momento de crisis" pero que su mandato "seguirá en base al plan planteado para los próximos años" de obras, de asistencia, salud y de creación de la nueva Policía Metropolitana, situación que generará una mayor "demanda" de fondos.
Así, Macri acusó el impacto del alineamiento de todos los diputados de la oposición en rechazo al aumento de impuestos y la reducción de partidas sociales, debido a que sería regresiva para la economía, afectaría los ingresos de la clase media y reduciría las políticas de asistencia.
El vicepresidente 1º de la Legislatura porteña, Diego Santilli, adelantó a DyN que están "dispuestos a hacer todos los cambios que sean necesarios al proyecto enviado por el Ejecutivo", aunque reclamó a la oposición que "hacer propuestas constructivas, sin poner palos en la rueda".
De todos modos, Macri rechazó la propuesta que lanzó ayer el ex jefe de gobierno porteño y actual diputado de la Ciudad, Aníbal Ibarra, de establecer como alternativa de financiamiento un impuesto al juego, que recogió el respaldo del resto de los opositores y generó un cortocircuito interno en el kirchnerismo.
"La Nación lidera en ese tema, estamos negociando porque la ciudad reciba el 100 por ciento de la recaudación del juego, que se corra Lotería Nacional y sea la Ciudad" la que administre, aclaró Macri.
Pese a la propuesta y la convocatoria a dialogar que presentó Macri, la mayoría de los bloques de la oposición volvieron a expresar su rechazo al proyecto y reclamaron que sea el gobierno de la Ciudad el que presente una nueva propuesta de gastos e ingresos para el año que viene.
Fuente: DYN
