Una de las peores crisis de los últimos años vive la policía de Santa Cruz. Desde el lunes a la madrugada comenzó una autoconvocatoria del personal por mejoras en las condiciones laborales. Todo empezó en la localidad de Caleta Oliva pero esta mañana se plegaron los efectivos de Río Gallegos y ahora la situación es preocupante.
La medida la adoptaron policías del norte provincial, donde determinaron que sólo prestarán guardias mínimas sin uniforme ni el uso de armas reglamentarias. El comisario Carlos Ayuso, jefe de la Unidad Regional Zona Norte, negó que haya "un autoacuartelamiento".
Es un "problema al cual estamos abocados porque somos un servicio público y lo están cumpliendo los jefes de las dependencias y suboficiales", aseguró, al advertir que no eran todos los uniformados los que estaban involucrados en la medida de fuerza. Ayuso afirmó que los policías le entregaron "un acta sobre las causas de la protesta" y continuaban "dialogando para normalizar la situación".
Por su parte, el intendente de Caleta Olivia, José Manuel Córdoba, reconoció que "hay una protesta" aunque la vinculó con Mario Monsalvo, un policía que fue puesto a disponibilidad por expresar públicamente un reclamo similar en 2010. "Queremos hablar con el jefe de la Unidad Regional para que se solucione el tema. Acá hay una vinculación política de Monsalvo", sostuvo el jefe comunal, a la vez que relacionó la protesta policial con la "situación personal" de ese efectivo.
Nafta al fuego. La situación recrudeció cuando el secretario de Seguridad de Santa Cruz, Alejandro Martín, dijo que los policías que protestan "buscan desestabilizar al gobierno" local. "Es una medida política que pretende desestabilizar al gobierno provincial, de parte de un hombre que legalmente ya no pertenece a la fuerza", señaló. Los reclamos, manifestó, "piden soluciones que no se pueden dar en 72 horas, pero se están analizando desde el poder político, y esperemos que el personal policial recapacite y se reintegre a sus funciones", informó la agencia DYN.
A raíz de esas declaraciones, en las últimas horas efectivos que cumplen servicio en las distintas reparticiones de la capital de Santa Cruz, comenzaron a llegar a las comisarías para permanecer allí, adhiriendo a la autoconvocatoria policial que comenzó el lunes. Según informó la agencia OPI Santa Cruz algunos indecisos optaron por responder a la consigna planteada, de asistir de civil y desarmados a cada repartición donde cumpla funciones y quedarse allí de vigilia, esperando una respuesta de las autoridades.