POLITICA
Ajuste de cuentas o robo?

Moyano fue al velorio del sindicalista asesinado

Los camioneros insisten con atribuir el asesinato de Abel Beroiz a un intento de robo, pero los investigadores creen que se trata de un ajuste de cuentas vinculado a una interna por la caja sindical.

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Moyano sum a la CGT al paro nacional por la muerte del docente neuquino, pero slo por una hora. | Cedoc

El secretario general de la Confederal General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano, se hizo presente esta mañana en la sede del Sindicato de Camioneros de Venado Tuerto, donde son velados los restos del sindicalista Abel Beroiz.

Sin hacer declaraciones, el líder de los camioneros ingresó pasadas las 8:20 a la sala del primer piso del sindicato donde se encuentran los restos de Beroiz y, luego, asistirá a la inhumación en el cementerio local.

El crimen del colaborador del pope sindical está envuelto en el misterio. Presenta todas las características de un hecho de características mafiosas, ya que el hombre fue atacado violentamente por dos agresores que no le robaron ninguna pertenencia. Desde el sindicato, en cambio, insisten en hablar de un intento de robo.

Beroiz era tesorero de la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros. El martes pasado fue baleado y acuchillado en un estacionamiento de Rosario.

Decenas de familiares y amigos del sindicalista participan del velatorio en la seccional Venado Tuerto del Sindicato de Camioneros, situada en San Martín 573, de esa ciudad santafesina. Los restos de Beroiz serán inhumados luego en el cementerio local.

El sindicalista, que también era secretario general del gremio de camioneros de Venado Tuerto, falleció cerca de la 1 de ayer en el Hospital de emergencias Clemente Alvarez de la ciudad de Rosario.

Beroiz, quien residía en la Capital Federal, era un hombre "muy cercano" a Moyano. Fue atacado el martes a las 7 de la mañana por dos jóvenes que lo interceptaron cuando fue a sacar su auto Volkswagen Passat de un estacionamiento del Automóvil Club Argentino (ACA), en un subsuelo de la rosarina Plaza Montenegro. Recibió dos balazos en el pecho y dos puntazos en el abdomen y en el lugar se halló un cuchillo ensangrentado abandonado por los agresores, uno de los cuales había alcanzado a ser herido por la víctima, que se resistió al ataque.

Si bien los investigadores del caso por ahora no descartan ninguna hipótesis, desde el sindicato negaron que se trate de un ataque en el marco de una interna gremial y atribuyeron el hecho a delincuentes comunes.

No obstante, el juez de instrucción Osvaldo Barbero y los policías de la seccional segunda, que están a cargo de la pesquisa, no están convencidos de que haya sido un robo porque la víctima conservaba un reloj, dinero, tarjetas de crédito y un teléfono celular, y apuntan a que se trató de una venganza o a un ajuste de cuentas.

Fuente: Télam