La CGT de Hugo Moyano, la CTA de Pablo Micheli y partidos opositores se movilizarán mañana a la Plaza de Mayo para exigir un aumento del mínimo no imponible, la universalización del salario familiar y el reparto de fondos de las obras sociales sindicales, entre otras demandas.
La CGT-Azul y Blanca del gastronómico Luis Barrionuevo, la Federación Agraria (FAA) de Eduardo Buzzi, el Peronismo Federal, el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Barrios de Pie, el Movimiento Teresa Vive y la FUBA, comprometieron su participación.
Los diputados del Frente Peronista anunciaron también su participación en la protesta, mientras que la marcha generó polémica en la UCR, que había respaldado la convocatoria, con la presencia de Ricardo Alfonsín durante su anuncio. Sin embargo, dirigentes radicales salieron a aclarar que no habrá convocatoria orgánica, sino participación de agrupaciones.
Los que sí marcharán por ese partido serán los integrantes de la Organización de los Trabajadores Radicales (OTR), la Juventud Radical y los referentes de la Federación Universitaria Argentina, conducida por dirigentes de la UCR.
La jornada. Las tres centrales obreras tienen previsto concentrar a sus afiliados a partir de las 16, para marchar luego hasta la Plaza de Mayo, donde a las 18 se realizará un acto que tendrá como oradores a la jubilada Lilia Meza, de la CTA, y a Pablo Micheli, mientras que el cierre estará a cargo de Hugo Moyano.
Ambos dirigentes justificaron la protesta de mañana en "la falta de respuestas" del Gobierno nacional a sus reclamos de "un aumento del mínimo no imponible, la universalización del salario familiar, el reparto de fondos de las obras sociales, un aumento de emergencia a los jubilados y de cuatro mil pesos no remunerativos por única vez para todos los trabajadores".
La protesta, cuyos organizadores confían en que será "multitudinaria", se realizará en el marco de la "unidad en la acción" que pactaron las tres centrales sindicales y a casi un mes del paro nacional que protagonizaron el 20 de noviembre.
Cumbre gremial K. Frente a la masiva marcha covnocada por el titular de la CGT oficial, los jefes sindicales alineados con la Casa Rosada fueron recibidos anoche por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, en la Casa de Gobierno. Estuvieron el secretario general de la UOM, Antonio Caló, y sus pares de la UOCRA, Gerardo Martínez y de los taxistas, Omar Viviani, entre otros.
El matalúrgico Caló, al frente de la CGT oficialista, tiene un proyecto para presentarle a la propia Presidenta que está en sintonía con el principal reclamo de Moyano: la suba del mínimo no imponile para tributar el Impuesto a las Ganancias. Como ese gravamen está inmóvil desde 2006, cada año miles de trabajadores superan la barrera por la inflación y deben pagar el impuesto.
La CGT de Caló discute si propondrá al Gobierno un decreto o un proyecto de ley, y evalúa si la mejor forma para lograr el "sí" de Fernández de Kirchner es la eliminación de la cuarta categoría –como reclama Hugo Moyano desde la CGT Azopardo–, o si será más factible proponer un porcentaje de aumento al mínimo no imponible.
Los encargados de elaborar el borrador ya tuvieron una primera reunión con técnicos de AFIP, confirmaron en la CGT oficialista. “No fue muy positiva la reunión. Planteamos las alternativas para solucionar el problema de Ganancias pero sólo nos escucharon, no dijeron nada. Tampoco se comprometieron a dar solución”, se quejó al diario PERFIL uno de los gremialistas consultados.