La
Dirección General de Aduanas (DGA) pidió esta tarde penas de
entre tres y ocho años de prisión para todos los procesados por el envío a España de casi
60 kilos de cocaína en cuatro valijas, en un vuelo de la empresa Southern Winds (SW) en
septiembre de 2004.
Durante el alegato realizado en el juicio oral que se realiza en los tribunales de Comodoro Py, la querella solicitó que se condene al colombiano Juan Aristizábal Tabares y al matrimonio español integrado por José Ramón González Villar y Elena Toimil Batán, con la pena de ocho años de cárcel como proveedor y destinatarios de la droga, respectivamente.
En tanto, para
Walter Beltrame y Ariel Tamburrini, ex empleados de SW, se pidieron seis años de prisión
por contrabando
agravado de estupefacientes, mientras que para el resto de los acusados se
pidieron penas de tres años y tres años y medio.
El juicio oral por el envío de casi
60 kilos de cocaína a Madrid en un vuelo de la aerolínea
Southern Winds (SW) ingresó hoy en la etapa de
alegatos después de dos meses de audiencias y se estima que el veredicto se dará a
conocer
a mediados de diciembre.
Fuentes judiciales informaron que el
Tribunal Oral en lo Penal Económico
(TOPE) 3 escuchó desde las 10.30 la exposición de los abogados de la Aduana,
Jorge de la Merced y Daniel Vázquez, quienes en esta causa actúan como
querellantes.
La audiencia se realizó en la sala del primer subsuelo de los tribunales federales de Retiro,
ubicados en Comodoro Py 2002 y estuvo encabezada por los jueces
Jorge Pisarenco, Luis Imaz y Enrique Schlegel.
Los alegatos continuarán el lunes, cuando será el turno del fiscal
Mariano Borinsky, mientras que una semana después, el 4 de diciembre, comenzarán a
exponer los abogados de los
ocho imputados, a razón de dos por día. Después, será la etapa de las réplicas, el
tribunal permitirá a los imputados pronunciar sus últimas palabras y se estima que el veredicto se
dará a conocer a mediados de diciembre, afirmaron los voceros.
Este caso se inició el
17 de septiembre de 2004, cuando
cuatro valijas que tenían membrete de la Embajada de Argentina en España fueron enviadas
desde Buenos Aires al aeropuerto de Barajas, en Madrid, en el vuelo 6420 de la empresa SW.
Como nadie las retiró, la
Guardia Civil revisó las maletas y descubrió que en su interior había
58,900 kilos de cocaína.
Casi un mes después, las autoridades de SW denunciaron el caso ante la Justicia, que comenzó
a investigar, y a mediados de febrero el caso se hizo público y estalló el escándalo porque además
uno de los acusados es hijo del entonces jefe de seguridad del Aeropuerto de Ezeiza, el comodoro
Alberto Beltrame.
A raíz del caso, el presidente Néstor Kirchner y el ministro de Defensa, José Pampuro, relevaron
al jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Carlos Rohde, y a Beltrame. Además, se disolvió la Policía
Aeronáutica Nacional (PAN) y se creó la
Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
En el debate, que comenzó el 18 de septiembre, están siendo juzgados
Walter Beltrame, ex encargado de atención a pasajeros frecuentes;
Claudio Baudino, ex supervisor de tráfico en Ezeiza;
Ariel Tamburrini, ex jefe de base en Madrid, y
Fernando Arriete, ex gerente de ventas. También son sometidos a proceso un
matrimonio de españoles,
José Ramón González Villar y Elena Tomil Batán, quienes se cree que eran los
destinatarios de la droga;
Guillermo Sardi, amigo de la pareja y el ciudadano colombiano
Juan David Aristizábal Tabares, acusado de ser uno de los remiseros que llevó una
de las valijas a Ezeiza. Durante el juicio, sólo aceptaron declarar Arriete y Toimil Batán, quienes
negaron su vinculación con el hecho, mientras que declararon cerca de 130 testigos a lo largo de
casi dos meses.
Fuente:
Télam