POLITICA
el robo a la vicepresidenta

“No soy ningún delincuente”, dijo el ex custodio de Michetti

Ante el juez, el policía declaró ser inocente del hurto de $ 245 mil y US$ 50 mil. Viajes al exterior y llamados que lo comprometen.

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Cruzado. Custodiaba a Michetti desde 2009 y confiaba en ella. | cedoc
David Cruzado, el policía investigado por haberle robado dinero a la vicepresidenta Gabriela Michetti, declaró que no es “ningún delincuente”. Pero en la causa, a la que tuvo acceso PERFIL, está muy comprometido como posible autor intelectual o cómplice necesario del delito.

Su testimonio, plasmado en cuatro carillas, tiene algunas contradicciones. Allí afirmó: “No soy ningún delincuente. A mí todo esto me preocupa un montón. Y después de un allanamiento en mi domicilio... no sé cómo decirlo, nunca hice nada raro, me da vergüenza que mis compañeros me tengan esposado y no me merezco estar preso”.
En la indagatoria, asistido por un defensor oficial, dio precisiones sobre lo que pasó el 22 de noviembre pasado. Esa noche, mientras Michetti fue a festejar el triunfo de Cambiemos a Costa Salguero, le robaron 50 mil dólares y 245 mil pesos de su casa. El juez le preguntó a Cruzado si él tenía la llave del domicilio: “Normalmente, las llaves las tiene ella en su cartera, llego al domicilio, armo la silla, la pongo a un costado, la bajo a ella y me brinda la llave. Es una llave chiquita”, relató.

En su rutina como jefe de la custodia de Michetti, Cruzado llegaba a las 8. “Le mando un mensajito a Gabriela para informarle que estoy en la puerta de su casa. Nunca tocamos timbre ni entramos por nuestros medios. Siempre respetando mi función”, aclaró.

Llamados. La clave, según la Justicia, está en los llamados que hizo Cruzado desde dos teléfonos activados con chips prepagos el día anterior al robo. Pero negó haber usado otros teléfonos que no sean los dos que llevaba con él: un Samsung S6 y un Nextel que le brinda la policía.
Sin embargo, las escuchas revelan varios llamados hacia un supuesto cómplice y por eso es el único procesado en la causa. Al cómplice lo están buscando. El policía de la Metropolitana, en cambio, le echó la culpa a un ex custodio de Michetti. “Fue él el que ingresó al domicilio”, dijo.

En su declaración, además, dio detalles de su vida personal. Confesó que, después del hecho, montó una fábrica de aberturas de aluminio en Claypole, su barrio. Y que al momento del robo, tenía una empresa en Entre Ríos, pero que a partir del 22 de noviembre compró unas máquinas y se dedicó “a hacer obras en Claypole”.
Cuando le preguntaron si su sueldo le permitía ahorrar, lo negó, pero aclaró que en 2015 se fue de vacaciones a Chile, que este año viajó a Brasil y que también estuvo en Cuba para curarse la enfermedad del Vitiligo, pero eso lo hizo con dinero de su padre.


Origen del dinero: declaran miembros de SUMA

El juez federal Ariel Lijo pedirá mañana la declaración testimonial a los integrantes de la Fundación SUMA, a requerimiento de la defensa de Gabriela Michetti. Es en la causa en la que se investiga el origen del dinero que le robaron el 22 de noviembre del año pasado, cuando festejaba en el búnker de Cambiemos la victoria electoral.
Se trata de 245 mil pesos y 50 mil dólares. De los 240 mil pesos, 200 mil pesos provenían de la cena de recaudación anual de SUMA, según explicó Michetti. La vicepresidenta también aclaró que los 50 mil dólares eran parte de un préstamo de su pareja, Juan Tonelli, para pagar una maestría a su hijo, Lautaro Cura.
El robo se habría llevado a cabo con la colaboración de David Cruzado, y un cómplice que habría ingresado al domicilio, pero que todavía no está identificado.