Grupos de trabajadores estatales volvieron hoy a protagonizar incidentes cuando lanzaron bombas de estruendo y apuntaron con morteros a policías durante una marcha contra la reforma previsional, mientras gremialistas del sector advirtieron que analizan llamar a un paro provincial.
Dirigentes de los 24 sindicatos que participaron hoy de la protesta aseguraron que analizan convocar a un paro general en toda la provincia si el gobernador, Juan Schiaretti, no promueve la suspensión del recorte jubilatorio.
La manifestación, de la que participaron según la policía unas 2 mil personas, se desarrolló por las calles céntricas de esta capital, pero un grupo provocó daños en algunos edificios públicos y agresiones a periodistas.
Un reportero gráfico del diario Día a Día recibió un puñetazo y luego un golpe con un mortero, lo cual le generó una lesión en una oreja.
El fotógrafo Nicolás Bravo dijo que fue atacado por los manifestantes cuando tomaba imágenes de la desconcentración del grupo y recordó que en la protesta anterior, en la que también hubo incidentes, sufrió el robo de parte de su equipo.
Además, un móvil de canal Doce de Córdoba sufrió la rotura de la luneta trasera y el estallido de una bomba de estruendo en el interior del vehículo que había sido arrojada por manifestantes. Los trabajadores de prensa también fueron insultados por los revoltosos.
Algunos integrantes del grupo llevaban sus cabezas encapuchadas y se guarecían detrás de escudos metálicos, mientras lanzaban bombas de estruendo y ataques con un mortero de fuegos artificiales con los cuales apuntaban directamente a las guardias policiales ubicadas en torno a la Legislatura.
Esos manifestantes estaban identificados con uniformes de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) e insignias del gremio de Luz y Fuerza. Durante los incidentes el grupo arrojó bombas de estruendo y otros elementos contundentes contra la sede de la Lotería de Córdoba.
El comisario mayor Mario Córdoba dijo que no hubo detenidos y que además del fotógrafo resultó herido un empleado de la Legislatura, afectado por la explosión de una bomba artificial.
Durante el acto central, los estatales pidieron la renuncia del interventor de la Caja de Jubilaciones, Osvaldo Giordano, y demandaron ser incorporados a la discusión de la mesa Nación-Provincia, en la que el gobierno intenta acordar el aporte de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
Los gremios solicitaron una audiencia con el gobernador, quien desde la muestra Agro Activa de Oncativo dijo que las manifestaciones deben ser para reclamarle fondos a la Nación.
Además del recorte a jubilaciones superiores a 5 mil pesos, la reforma incluye una nueva forma para calcular los haberes y afecta los ingresos de los jubilados.
Fuente: DyN