La titular de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas, dijo que "es una buena noticia, esperada muchos años, y es un modo de ir desandando la historia desde la verdad", la decisión de la Iglesia Católica de reabrir los archivos referidos a la última dictadura cívico-militar.
El Vaticano y la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) anunciaron este martes que se concluyó con el "proceso de organización y digitalización" de esos documentos y que próximamente se abrirán a la consulta de las "víctimas y familiares directos de los desparecidos".
"Tendremos que ver cómo se presentan", adelantó Cortiñas en radio La Red, quien recordó que "hubo curas que integraron el Terrorismo de Estado". Entre ellos, citó a Pío Laghi (Nuncio en Buenos Aires desde julio de 1974 a diciembre de 1980) quien "estaba al tanto de todo lo que ocurría porque jugaba al tenis todos los días con (el genocida, Emilio) Massera". También lamentó que en aquellos años "muchos (religiosos) entraban en los campos del horror y salían de ahí sin decir una sola palabra de lo que veían".
Destacó Cortiñas que la información que aporte la Iglesia "puede ayudar a encontrar más nietos" y también va a permitir que "se juzgue la complicidad" eclesiástica en el golpe de Estado que dejó 30 mil desaparecidos. En este sentido, indicó que la información puede servir para que se sepa "qué pasó con nuestros hijos e hijas detenidos y desaparecidos y a quiénes les entregaron a nuestros nietos".
"La Iglesia fue parte de esa época tan siniestra y dolorosa para todo el pueblo argentino", sintetizó Cortiñas; quien además al ser consultada sobre la idea de 'reconciliación' instalada por el menemismo consideró que "no" está de acuerdo porque "lo que hay que buscar es la verdad y la Justicia".
"Éste un momento especial y no nos queremos desilusionar. No se puede jugar con la expectativas", finalizó Cortiñas al solicitar que los archivos que desclasifique la Iglesia "sean completos".