“Los votos están cantados. Esta es una ley aprobada”, aseguró la diputada del FPV, Diana Conti, al terminar el debate de Comisión en el que se discutió el proyecto sancionado en el Senado. Con dictamen favorable, la iniciativa será tratada mañana en el recinto de la Cámara de Diputados a partir de las 11.30.
La legisladora dio por hecha la estatización de la empresa Compañía de Valores Sudamericana (CVS), ex Ciccone Calcográfica, y defendió la medida, pese a las críticas de la oposición, que considera que la iniciativa es una estrategia para solapar la supuesta implicación del vicepresidente Amado Boudou en el salvataje de la empresa.
“Es un avance más que el Estado recupere funciones que le son especificas”, estimó Conti, en relación a la absorción de las funciones de CVS en caso de pasar a la órbita estatal. “Lo otro es chicanería”, fustigó.
En esa misma línea, defendió la decisión del vicepresidente de no dar explicaciones en la Cámara baja sobre su vinculación con la imprenta. “El Vicepresidente no tiene por qué dar explicaciones a chicaneros”, remarcó. “No viene porque no quiere, y nosotros tampoco”, aclaró.
Oposición dócil. La diputada no ahorró calificativos para referirse a la oposición. “Son borregos que leen Clarín y La Nación y después vienen acá a buscar cámara”, espetó Conti. “Se dejan llevar por las narices”, añadió.
“No tienen vergüenza”, continuó. “Me parece una vergüenza, una falta de respeto. Es una falta de seriedad que hablen por lo que leen y no por lo que debiera ser”, se quejó la diputada.