El ministro de Salud, Ginés González García, admitió que los indicadores epidemiológicos de las últimas cuatro semanas muestran que el coronavirus “está en ascenso” y, de acuerdo a sus estimaciones, el pico de contagios “va a ser más cercano a fines de junio”.
Desde el inicio de la cuarentena, las estimaciones sobre cuándo llegaría el punto máximo de contagios señalaron que se daría en mayo pero con la continuidad de la cuarentena estricta focalizada en el área metropolitana ese horizonte temporal se fue extendiendo hasta llegar a una perspectiva para finales del próximo mes.
Para González García, el momento en el que se termine la curva de “ascenso de casos depende mucho de lo que hagamos nosotros, de lo que nos cuidemos y de lo que cuidemos al resto”.
Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, no predijo cuándo puede llegar el pico de contagios porque “lo vamos a conocer en forma retrospectiva, en el nivel en el que el grado de contagiosidad baje de forma sostenida”, indicó en redes sociales.
Ginés González García retomó sus actividades luego de un incidente neurológico que lo obligó a permanecer internado en el Sanatorio Otamendi, donde se le detectó un hematoma subdural que le ocasionó una parestesia distal del brazo izquierdo.
El funcionario subrayó que se está “trabajando intensamente” con las autoridades de la provincia y de la Ciudad de Buenos Aires, donde se pone “particularmente la mirada por la gran densidad demográfica que representan los barrios populares”.
Precisamente, el ministro precisó que dos tercios de los casos positivos de coronavirus “son en barrios populares”, lo que va en línea con la lectura de que “todas las enfermedades más comunes de la especie humana son más frecuentes en las clases medias y medias bajas que en las clases medias altas y altas”. En ese contexto, el Gobierno reforzó el programa Detectar, que apunta a diagnosticar casos de coronavirus en barrios populares, como la Villa 31 y la Villa 1-11-14 en el ámbito porteño, o la Villa Azul, en el límite entre Quilmes y Avellaneda, donde ya suman más de 200 casos positivos de Covid-19.
Ginés González García reconoció que la epidemia “comenzó con la clase media y media alta que viajaba”. “Fueron ellos los que hicieron que llegara el virus a nuestro país y ahora está llegando a los barrios vulnerables”, dijo.
Allí es donde resulta más complicado mantener el aislamiento debido a la gran cantidad de habitantes que hay en pequeños espacios o por no contar con las medidas sanitarias básicas para combatir el virus.
Según el ministro, es “muy difícil” lograr el aislamiento en estos barrios porque se necesita “una terrible infraestructura” para garantizar que sus habitantes no se contagien entre sí y mantengan el distanciamiento social, entre otras medidas de prevención.
Las terapias intensivas
La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, aclaró que “nuestras terapias intensivas no están en situación crítica”, pese a que el 88% de los pacientes internados con cuidados especiales están concentrados en la Ciudad y la Provincia.
Vizzotti explicó que se está trabajando en la mesa de seguimiento del Área Metropolitana para el “monitoreo” de esa situación y decidir qué medidas implementar.
De acuerdo a las cifras oficiales, el 54% de las personas internadas en terapia intensiva con coronavirus están alojadas en la Ciudad mientras que el 34%, en Provincia. Por otra parte, se mantienen Formosa y Catamarca como las únicas dos provincias son casos y se redujo a tres las jurisdicciones en cero en 14 días: San Luis, La Pampa y Santa Cruz.
