La esposa de Julio De Vido, Alessandra Minnicelli, sostuvo que "no hubo ni un solo" sobreprecio en la gestión de su marido, detenido bajo cargos de corrupción, cuando ocupó el cargo ministro de Planificación Federal. Además criticó a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner porque "si ella hubiese tenido un gesto no lo desaforaban (como diputado nacional) y no iba preso" al penal de Marcos Paz.
En un reportaje que publica hoy el diario Clarín, Minnicelli -ex síndica general adjunta de la Nación- opinó que "el gran mote (sobre la gestión de De Vido) es el sobreprecio y no hubo ni uno solo". "Le atribuyen maniobras porque era el ministro, pero él no podía estar en el día a día en las compras de cada área", siguió la ex funcionaria, que recordó que "cada uno de los secretarios (del Ministerio) era designado por el Ejecutivo y tenían incumbencias propias".
De Vido está detenido desde el 25 de octubre pasado por sendas causas por irregularidades en las obras de remodelación de la mina de carbón de Río Turbio y sobreprecios en la importación de gas natural licuado (GNL). Actualmente está en el penal de Marcos Paz, donde su esposa lo visita a menudo. Minnicelli volvió a culpar a Cristina, quien días antes de su detención se había negado a asegurar que ponía "las manos en el fuego" por De Vido.
"Esto empezó con la discusión ridícula de la inhabilidad moral donde a Julio le sobraron 16 votos y de golpe en el desafuero el PJ se repliega porque ella dijo que no ponía las manos en el fuego por Julio", interpretó sobre el desafuero en la Cámara de Diputados que habilitó la detención del ex funcionario. "El peronismo es un movimiento vertical cualquier gesto o movimiento que hace el líder, determina", apuntó.
Además marcó diferencias entre Cristina Kirchner y la gestión de su esposo, el ex presidente Néstor Kirchner. "Ella tiene una forma de gestión y vinculación con las personas distinta a Néstor, al gobernar él tenía una oreja grande y ella no tanto, es mi apreciación", apuntó.
"Con Néstor había una relación de conocimiento de muchos años desde Santa Cruz, cuando llegó Cristina al gobierno buscó desprenderse de la política y de la gente de Néstor, incluso físicamente", continuó.
Consultada sobre si pondría las manos en el fuego por la ex presidenta, respondió: "Yo hablo de confianza y ella defraudó mi confianza, la defraudó". También dijo que su esposo "está decepcionado y eso da tristeza, esperaba otra actitud de quien conduce".