Y pasó el "Debate Capital"... Los candidatos porteños trataron anoche, como pudieron, de llevar agua a sus molinos, a apenas poco más de una semana para las elecciones legislativas. Fue en "A Dos Voces" , el tradicional ciclo político de Bonelli y Silvestre en TN, donde Gabriela Michetti (PRO); Carlos Heller (Encuentro Popular por la Victoria), Alfonso Prat Gay (Acuerdo Cívico y Social) y Fernando "Pino" Solanas (Proyecto Sur) mostraron sus cartas, los dos primeros como obligados defensores de gestión, y los otros dos como opositores dispuestos a "cambiar la historia".
Obviamente, es más fácil hablar "desde el llano" (para seguir con TN) y por eso Michetti y Heller fueron los que peor la pasaron. A Gabriela la castigaron todos y ella, en su papel de defensora a ultranza del macrismo, soportó como pudo los embates, que en determinado momento la pusieron contra las cuerdas, sobre todo cuando se habló de partidas subejecutadas o el tema hospitales, donde Solanas "hundió el bisturí".
Lo de Heller fue a veces más duro, porque, se sabe, tratar de defender a Kirchner en Capital Federal es casi épico. El banquero, de enorme cintura televisiva, soportós los ataques con ironías, agitó hasta el cansancio el tema de los 4 millones de empleos creados por el Gobierno K, habló de "lo que queda por hacer", pero se sumergía entre sus cuadros y papeles cuando Solanas gritaba desde la punta izquierda nombres nombres muy conocidos para el kirchnerismo, como Cristóbal López o Barrick Gold.
Para Prat Gay el problema mayor fue su "afasia" televisiva. Leyó la mayor parte de sus exposiciones y eso, sumado a que su cara parece imperturbable, deja un saldo "distante" entre lo que expresa y el que escucha. El candidato de Lilita intentó por todos los medios castigar al Gobierno nacional, chocando con Heller que defendía al "modelo kirchner" y eso permitía a Michetti recuperar el aliento.
Pino Solanas reflotó varias veces la cuestión ambiental, cuestión que aborda en la mayoría de sus apariciones televisivas (aunque en "Palabras más, palabras menos" ironizaron el martes respecto a que la palabra "minería" no aparece en la propuesta formal de Proyecto Sur. Habló de ferrocarriles, petróleo y recursos renovables, temas que domina y que, a la vista de los acciones antes menemistas y ahora kirchneristas, son de seguro impacto discursivo.
Otro tema con el que el cineasta le pegó bajo la línea de flotación al macrismo fue cuando en determinado momento Michetti habló de la "trata de personas" y Pino le disparó: "A propósito de la trata de personas, qué me podés decir de los 54 prostíbulos cuyo funcionamiento ustedes permiten en Capital Federal". La pausa fue más PRO que nunca.
El debate se dividió en tres temas: "Modelo de país", "Modelo de Ciudad", y "Seguridad", y cada uno de los candidatos contó con un minuto para exponer sobre el tema en cuestión, más un minuto de derecho a réplica, y luego 12 minutos de discusión libre.
Durante el tema "modelo de país", Michetti cuestionó los números del INDEC y consideró que "el rol del Estado es igualar oportunidades", en tanto que Prat Gay y Solanas hicieron hincapié en la necesidad de disminuir la pobreza. El candidato del Acuerdo Cívico aseguró que "14 millones de personas no llegan a fin de mes" y señaló que "el Gobierno dice que cuida a los
jubilados, pero tres de cada cuatro cobran la jubilación mínima y vive en condiciones de pobreza".
Heller, enfático, defendió el modelo económico del kirchnerismo al señalar que "se recuperaron cuatro millones de puestos de trabajo y se incrementó el presupuesto en educación". También criticó que el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, "dijo que si él gobernara la Argentina daría marcha atrás con las medidas de estatización", y de esta manera se alineó con el discurso de la cúpula kirchnerista al señalar que "eso es volver a los 90". Solanas lo puso en aprietos con los subsidios a grandes grupos empresarios y la "falta de credibilidad" del INDEC, las "estatizaciones para los amigos" y hasta se animó a cargarlo diciendo que al Gobierno K "sólo le falta mentir sobre el Servicio Metereológico".
Luego de que Prat Gay dijera que el Gobierno pretende lanzar un plan de estatizaciones que incluye a la banca, Heller lo acusó de
hacer "terrorismo barato" y aseguró que "no hay ningún plan para estatizar los bancos".
Por su parte, Michetti consideró que "estas cuestiones no van al fondo de la cuestión" porque "el tema con una estatización es ver quién controla, cómo se brinda el servicio", y consideró que "la estatización de Aerolíneas Argentinas, hoy, está mal hecha", en sintonía con Macri que el martes dijo en TN que él volvería a privatizarla.
Cuando los candidatos se adentraron en el tema "Modelo de Ciudad", fue el momento de Michetti de resistir los embates: Solanas aseguró que "la mitad de los quirófanos no funcionan y se redujo el presupuesto de Instituto de la Vivienda". Prat Gay eligió por citar a Macri durante el debate de 2007, cuando se postulaba a jefe de Gobierno cuando dijo la famosa frase "¿Somos idiotas que no podemos construir 15 kilómetros de subte?". Como él no los hizo, se la facturaron a Michetti.
La ex vicejefa de Gobierno defendió como pudo la gestión macrista y dijo que se ejecutó en 2008 "el 94 por ciento del presupuesto", pero Heller la puso en jaque al advertir con cifras macristas que "disminuyó la inversión en educación y llegaron al 94 por ciento haciendo vereditas muy lindas" y Solanas le enrostraba las subas impositivas.
Finalmente el tema "Seguridad", allí hubo consenso en cuanto a la necesidad de crear una Policía Metropolitana, aunque Prat Gay, Heller y Solanas advirtieron que el primer problema que se debe atacar para combatir la inseguridad es la pobreza. En este punto, Heller defendió "la recuperación del empleo" por parte del Gobierno, mientras Prat Gay propuso la creación del "ingreso ciudadano a la niñez", algo en lo que Michetti concordó parcialmnete.
Se notaron, vale decir finalmente, los ataques personalizados: Heller le apuntó específicamente a Prat Gay y Michetti, mientras Solanas se concentró en el candidato del kirchnerismo. Habrá que ver que dicen, ahora, las encuestas post debate.
Fuente: NA