Juan Pablo Piccardo, presidente de Subterráneos de Buenos Aires (Sbase), cuestionó a los metrodelegados que controlan la Línea B por la sorpresiva interrupción del servicio: "Lo que nosotros creemos es que, desde que se inauguraron las nuevas estaciones, pusieron una excusa atrás de otra para no trabajar".
En diálogo con Ciudad GótiKa, por Radio La Red, el funcionario macrista enumeró: "Que había problemas de seguridad, que había filtraciones, que la cochera no estaba habilitada. Ahora se sienten inseguros porque la gente los insultó".
En dos oportunidades se refirió a los altos sueldos que perciben los metrodelegados. "Si no quieren trabajar que den un plazo al costado", les pidió. "Claudio Dellecarbonara cobra 16.500 pesos por cuatro horas y media" de trabajo.
"La ciudad está haciendo un enorme esfuerzo haciendo cargo del servicio, invirtiendo muchísimo dinero para mejorar el servicio, invirtiendo muchísimo dinero para poner nuevas estaciones a funcionar", afirmó Piccardo. "Creemos que se acabó la etapa donde los protagonistas del subte son los metrodelegados y acá los únicos protagonistas del subte es la gente".
Al mismo tiempo, indicó que "es una vergüenza que haya 50 tipos que perjudican a 300 mil (la Línea B traslada, por día, a 350 mil personas) que se les ocurre no abrir una línea de subte", dijo Piccardo. "Es un delito, es inaceptable que esté pasando en la Argentina que vivimos, esto se tiene que terminar".
El presidente de Sbase aseguró que tiene que darse un "cambio de paradigma: que la gente del subte trabaje" porque "hay mucha gente que quisiera trabajar por el sueldo que tienen los metrodelegados por el dinero que ellos cobran".