"Soy víctima de escuchas ilegales por parte de la SIDE", denunció el viernes pasado el legislador del PRO Federico Pinedo en un documento, que elevó a la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos de Inteligencia.
La ultrakirchnerista Stella Marías Córdoba, a cargo del órgano parlamentario que debe supervisar las tareas de los espías, no respondió la denuncia del diputado macrista. Tampoco atendió los cuatro llamados de PERFIL.
Pinedo accedió, casi por casualidad, a un expediente judicial que investiga presuntas pinchaduras telefónicas a funcionarios de la administración k y dirigentes opositores del Congreso. E hizo la denuncia.
El listado de teléfonos, que llegó al despacho del candidato de PRO, y que fueron corroboraron por los peritos del Ministerio de Seguridad provincial y el ingeniero de de la Universidad de Buenos Aires Ariel Garbarz, es interminable.
Un disco compacto con los teléfonos espiados fue entregado a la Justicia en los últimos meses. Desde León Arslanian, Jorge Telerman, Rafael Bielsa, Remo Carlotto, Santiago Montoya y un secretario privado de Nilda Garré hasta los diputados Pinedo, Eduardo Macaluse y Esteban Bullrich figuran en las nóminas de las pinchaduras. También los celulares de legisladores Diego Kravetz, Miguel Talento y Miguel de Estrada.
Se trata de la causa es Nº254-373, a cargo del juez de garantías Nº1 de San Isidro, Rafael Sal Dari. El expediente, que deambuló por todo el Departamento Judicial, podría ser elevada en las próximas horas al fuero federal de Zárate-Campana para determinar si las presuntas intervenciones telefónicas están autoridades por la Justicia.
El origen. El magistrado Sal Dari, a pedido de la Fiscalía de Delitos Complejos, halló en marzo de este año un aparato interceptor de líneas telefónicas, propiedad de la SIDE, instalado en un local Telecom del partido de Escobar.
Según los expertos, que participaron del allamiento en la calle Presidente Perón y las vías de ex ferrocarril Mitre, el sofisticado equipo valuado en 200.000 pesos puede monitorear 3.780 líneas al mismo tiempo y detectar el lugar, donde la persona realiza la llamada.
Pinedo, que analiza presentarse como querellantes en esa causa, exigió citar al Congreso al número uno en los papeles del organismo de Intelegiencia, el pingüino Héctor Icazuriaga. "Debe explicar porque están intervenidos los telefónos del conmudator del Congreso, de mi despacho y también el de otros diputados oficialistas y opositores", sostuvo en diálogo con PERFIL.
El Subsecretario de Ingresos Públicos, Santiago Montoya, fue el disparador. Aportó el dato clave para el descubrimiento del equipo utilizado por los espías para las pinchaduras. El recaudador bonaerense había sido víctima de una intimidación en una casa, que estaba construyendo en la localidad de San Isidro. Cuatro hombres con armas largas, un automóvil y una moto quisieron hallar su nuevo domicilio. En aquél entonces, algo preocupado, Montoya le relató al ministro León Arslanian y al gobernador Felipe Solá lo sucedido y sus sospechas sobre el caso.
Al día siguente, Montoya declaró en sede judicial que sus teléfonos estaban intervenidos desde algún sitio de la Provincia de Buenos Aires. Y eso posibilitó que saltara a la luz uno de los secretos mejor guardados por los organismos de Inteligencia: los aparatos para espiar.
Pinedo denunció ser víctima de escuchas ilegales
La revelación enrarece el clima poítico preelectoral. El diputado del PRO afirmó que el teléfono directo de su despacho es monitoreado por los espías de la SIDE. Y desplegó la lista de otros "pinchados".
