POLITICA

Policías de Misiones siguen acuartelados y no hay bancos

Mil efectivos protestan por mejoras salariales. Qué le piden a Closs.

La sede del Comando Radioeléctrico 1, el más importante de la fuerza policial, es utilizada como punto de concentración por su cercanía con la zona céntrica de Posadas, donde se lleva adelante la conc
| Gentileza diario Territorio Digital (Misiones)

Un millar de efectivos de la policía de Misiones permanecen autocuartelados en Posadas desde la medianoche del miércoles en reclamo de un salario básico de 2.200 pesos y la reincorporación de cinco agentes cesanteados. Por esta "huelga" los bancos de varias localidades -como el Banco Nación- no abrieron al no haber servicios de seguridad adicionales.

Hyo por la mañana ya eran cerca de mil los policías plegados a la protesta en los municipios de Posadas, Eldorado, Puerto Rico, Jardín América, Iguazú, Apóstoles, Santa Ana, Candelaria, Garupá y San Pedro.

A todo esto, el jefe de la Policía de Misiones, Benjamín Roa, reconoció que el reclamo "es genuino y salarial", pero pidió cordura. Al mediodía estaba prevista una reuniones entre los policías, la cúpula policial y autoridades de la gobernación misionera.

La protesta. Si bien no se dieron a conocer escalas de ingresos, se supo que un suboficial percibe entre 2.700 y 3.200 pesos de sueldo, conformado en su mayor parte por adicionales, ya que el básico no supera 400 pesos, con incidencia en las bajas jubilaciones.

La sede del Comando Radioeléctrico 1, el más importante de la fuerza policial, es utilizada como punto de concentración por su cercanía con la zona céntrica de Posadas, donde se lleva adelante la concentración.

De acuerdo con los argumentos esgrimidos por los portavoces de la protesta, el rechazo de un recurso judicial para evitar la exoneración de al menos cinco efectivos habría actuado como detonante, aunque el malestar por los bajos sueldos comenzó a insinuarse a principios de este año.

En un petitorio dirigido al gobernador K Maurice Closs, los efectivos aseveraron que no tienen como intención "desestabilizar al gobierno" ni "provocar disturbios", aunque se ampararon en "el derecho constitucional a huelga y a reclamo por mejores condiciones salariales como ciudadanos argentinos".