"Es necesario revisar las estrategias", esa fue la conclusión final de Alfredo Feijo, jefe del Servicio de Infectología del Hospital Muñiz. En diálogo con Perfil.com, el profesional en la materia manifestó su posición con respecto a la política de fumigaciones que se está desarrollando desde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Aunque no desestimó la política de fumigaciones que lleva adelante la comuna porteña, el infectólogo del Hospital Muñiz aseguró que la forma en que se desarrolló el trabajo no alcanza. Feijo planteó distintas falencias en las estrategias que hasta el momento se desarrollaron para combatir el mosquito que transmite el dengue.
"Las fumigaciones se pueden hacer con distintos productores, pero se están usando derivados piretroides", señaló Feijo, quien agregó: "Estos insecticidas tienen bajo poder residual, no tiene efectividad más allá de equis cantidad de días". En ese sentido, el infectólogo planteó que "para que una fumigación dé resultado tiene que ser hecha en forma repetida".
Eliminar las larvas. Otra cuestión que pareciera que no fue tenida en cuenta, es que las fumigaciones (tal como se desarrollaron en la ciudad de Buenos Aires) sólo eliminarían a la "población adulta" de los mosquitos.
Feijo manifestó que las fumigaciones periódicas tienen que ser "complementadas con otras acciones". Allí destacó la importancia de eliminar los "criaderos", utilizar las "máquinas adecuadas", crear "una niebla" y "después ir a los lugares de riesgo". "Nadie piensa la fumigación como única estrategia", señaló el infectólogo.
Por su parte, Raúl Montenegro, presidente de la Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) y Premio Nobel Alternativo 2004 criticó en una entrevista con Perfil.com las fumigaciones que se realizaron en distintas provincias. “Una cosa es fumigar en un ambiente urbano, que tiene sus riesgos, y otra distinta es fumigar en un ambiente periurbano nativo", explicó.
Montenegro manifestó que en los ambientes periurbanos con las fumigaciones "no sólo se destruye el mosquito, sino también a los enemigos naturales del mosquito". Mientras tanto, Tomás Orduña (médico y coordinador del servicio de medicina del viajero del Hospital Muñiz) consideró que "la presencia de mayor cantidad de mosquitos tiene correlación con el hombre".
Tres escenarios. Feijo especuló sobre la posibilidad de tres escenarios venideros. 1) "Si se mantienen las altas temperaturas (ideales para la transmisión del dengue) es posible que aparezcan casos de brote". 2) "Si comienza a hacer frío es probable que se corte la transmisión de nuevos casos". 3) "Con o sin epidemia, es necesario empezar acciones para el futuro y revisar estrategias".
