En los congresos de periodismo e internet el tema recurrente (y cansador) son las supuestas ventajas de lo digital frente a los medios tradicionales. Para muchos, el valor principal es la posibilidad de interactuar con los lectores, que termina con el discurso unidireccional de la prensa. También está la instantaneidad, esto es que apenas ocurrido un suceso y mientras se va desarrollando, los medios pueden informar en una continuidad sin cierre. La otra gran "verdad" que se pregona es que se acabó la mediación del periodista -algo que hasta los Kirchner pontifican- y que es el público quien decide qué es lo importante, y no un editor sentado en un escritorio. ¿Es tan así? ¿Cómo saberlo?
La tragedia sin antecedentes que vive Polonia y la cobertura que se ha hecho desde minutos después del accidente nos permite cotejar con hechos algunas de aquellas teorizaciones.
En Perfil.com, la versión digital del diario Perfil, solemos contradecir algunas de aquellas leyes escritas y repetidas en internet. Por primera vez en tres años, desde que se abrieron los comentarios de los lectores debajo de las noticias, esta vez decidimos cerrarlos (contradiciendo aquello de la interacción del lector). ¿Por qué? Porque sabíamos que la dimensión de la tragedia política e institucional polaca iba a excitar a muchos lectores argentinos para hacer bromas de mal gusto y comparaciones nefastas. Al trabajo habitual de los editores para cubrir la actualidad, sumamos una tarea más, eliminar todos los comentarios de los artículos referidos al accidente.
En Perfil.com privilegiamos la instantaneidad, pero no la santificamos. Muchas veces solemos demorar una noticia que merece ser cotejada o porque la rapidez de su publicación sólo intoxica de datos al lector. Esto suele generar encontronazos internos, porque algunos de nuestros editores están convencidos de que el periodismo digital es escupir noticias una tras otra sin cumplir con el cometido que ya está indicado en sus cargos: editar. Editar es elegir, no empachar. Sin embargo, cuando un avión cae con toda la elite gobernante de un país, la instantaneidad es un valor supremo, como así también la jerarquía que debemos darle al hecho. A las 5.38 de la madrugada, Perfil.com fue el primer diario digital de la Argentina en colocar el accidente como noticia ultradestacada. Recién las 8.20 y 8.30, clarín.com y lanacion.com comenzaron a informar sobre el tema. Y mucho después con la dimensión que el caso requería.
En Perfil.com no valoramos la primicia por la primicia en sí (algo que ya no existe porque ahora las primicias se pueden replicar con minutos de diferencia), pero en tres sucesos notables de los últimos ocho meses nuestro sitio fue el primero en publicar y dimensionar tres noticias “grandes”: la muerte de Mercedes Sosa, el megaterremoto de Chile y, ahora, la tragedia aérea polaca.
Por último, sucesos como el de hoy muestran que el papel del periodista, del editor, de quien selecciona y dimensiona la noticia, sigue más vigente que nunca. Y al contrario, cuánto mayor es el océano de datos y estadísticas, más se necesita. Los lectores de Perfil.com, y de cualquier sitio de diarios tradicionales, no fueron a buscar a los blogs o a seguir en Facebook el desarrollo de la noticia. Fueron a “sus” medios para tener una idea cabal de la real dimensión del accidente aéreo. Desde lo humano y lo político. El resto puede esperar.
*editor general de Perfil.com