Una puerta que gira y gira sin parar será el escenario en el que el martes Sergio Massa lanzará una fuerte campaña contra la designación de Roberto Carlés como juez de la Corte Suprema de Justicia. “Basta de jueces ‘sacapresos’”, será la consigna que repetirá el candidato a presidente del Frente Renovador y que sacará a la calle con mil mesas para que el ciudadano firme el petitorio que rechaza al abogado como postulante.
Con esto, Massa pretende recuperar la agenda mediática, tal como sucedió con la reforma del Código Penal. El pliego de Carlés será debatido en el Senado el próximo 15 de abril y deberá tener la votación de los dos tercios de los votos, para lo cual el oficialismo necesitará el apoyo de al menos una parte de la oposición que resiste el nombre. Por ello, Massa buscará mostrarse como el dirigente que encabezó esta pelea.
En medio de la recolección de firmas contra el abogado, Massa promete más fotos con dirigentes radicales. Ayer consiguió que el gobernador radical Ricardo Colombi lo recibiera en su provincia y hasta le abriera las puertas de su casa. No es un dato menor, ya que este gobernador había aportado votos clave en la Convención radical en la que se aprobó el acuerdo con Mauricio Macri.
Las fotos con el radicalismo, el aceleramiento de la campaña en la provincia de Buenos Aires, la pelea por la designación del juez de la Corte Suprema y marcar fuertes diferencias con Mauricio Macri –sobre todo en el tema del juego– es a lo que el massismo apunta para recuperar el terreno.
Mientras tanto, preparan una fuerte movilización para el 1° de mayo, día que Massa eligió para lanzar su campaña presidencial. El estadio elegido será Vélez, cancha que pretenden llenar, sobre todo, porque en 2012 la presidenta Cristina Fernandez de Kirchner recordó allí los nueve años del mandato de Néstor con tribunas repletas de militantes.