La diputada Nora Guinzburg, que conforma el bloque único del Frente por los Derechos Ciudadanos, reclamó hoy a sus colegas de la oposición "autoconvocarse en sesiones permanentes" para debatir acerca del conflicto entre el Gobierno y la dirigencia agropecuaria.
Guinzburg propuso en una carta abierta "un mecanismo de turnos entre los legisladores que cubra las 24 horas", a partir del martes, "de manera tal de establecer una guardia que asegure una presencia en el recinto para dialogar" sobre el tema.
"Los diputados que no formamos parte del oficialismo debemos encontrar caminos comunes, más allá de la política partidaria, para acercarnos a la ciudadanía sobre todo en momentos de gravedad institucional como estos”, afirmó la legisladora en un comunicado. Para Guinzburg, la iniciativa busca que la oposición, pese a los "pocos o nulos" recursos con los que cuenta "para revertir la situación que vive el país, realice al menos una protesta pacífica y acompañe al pueblo en estos momentos aciagos que atraviesa".
"Advertimos como el Poder Ejecutivo en su accionar va invadiendo significativamente esferas de competencia de los otros poderes del Estado y pareciera que ya no tiene límite alguno. Empezó con la creación de un Consejo de la Magistratura dependiente, el que será complementado o sustituido, según el caso, por la Ley de Subrogancias que conduce a hacer al Poder Judicial cada vez más adicto del régimen imperante. A ello debemos sumarle los Decretos de Necesidad y Urgencias y los Superpoderes, absolutamente injustificables hoy pues no atravesamos ninguna emergencia", señaló Guinzburg.
"Ahora, por meras resoluciones ministeriales se impone un impuesto al sector agropecuario, que es anticonstitucional pues el Poder Ejecutivo no tiene facultades para ello, confiscatorio por su alícuota y violatorio de la ley de coparticipación federal. Para ello cambia su designación llamándolos retenciones, cuando su significado y efectos son los mismo. La Presidenta de la Nación no sólo se niega a reconsiderar esta medida sino que, como es su costumbre, rehuye el diálogo y confunde gobernar con imponer, despreciando el consenso del que jamás puede desprenderse quien conduce los destinos de una Nación", agregó.
"Ante tal situación los Diputados que repudiamos este proceder, como representantes de la ciudadanía no podemos quedarnos impotentes con los brazos cruzados. Estimo que una forma de llevar a cabo este rol de un modo eficiente es estableciendo guardias permanentes de legisladores en el recinto, turnándonos entre todos de manera tal que siempre haya una presencia, a fin de poder dialogar con nuestros representados que lo requieran para conocer mejor su problemática, ser receptores de sus inquietudes y polea de transmisión de sus propuestas. Este mecanismo lo llevaríamos a cabo sin perjuicio de seguir concurriendo a las sesiones ordinarias y otras que se designen, como también continuar cumpliendo las restantes tareas legislativas que nos competen", concluyó.