Después de cuatro años de acampar frente a la Casa Rosada, la Asociación de Veteranos de Guerra TOAS Plaza de Mayo ocuparon la Torre de Ingleses, en Retiro, para que el Gobierno les reconozca los "honores" de ex combatientes y, así, el derecho a cobrar una pensión vitalicia que ronda los $5.000 pesos mensuales.
A pocos días de cumplirse el 30º aniversario del conflicto bélico en el Atlántico Sur, unos 400 ex conscriptos continentales -es decir, soldados que no fueron enviados en 1982 al archipiélago pero se mantuvieron en actividad en el país- marcharon desde la Plaza de la República hacia el monumento, rompieron los candados e ingresaron a la torre para desplegar banderas y afiches con los reclamos, cuya destinataria central es la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
A los pocos minutos, se desplegó un cordón policial tanto de la Policía Metropolitana como de la Federal, pero ninguna fuerza procedió a desalojarlos, ya que el Ministerio de Cultura porteño no realizó en un primer momento una denuncia ante la Justicia. Después de casi ocho horas, tras una asamblea, la agrupación decidió levantar la toma.
"Pedimos que nos reciba la Presidenta. Ya hablamos con los ministros y al parecer ellos no tienen el guiño político para resolver esta cuestión, cuando ya un fallo de la Corte Suprema reconoció a un ex conscripto continental como ex combatiente pleno", señaló a Perfil.com el portavoz de los veteranos TOAS (Teatro de Operaciones del Atlántico Sur), Tulio Fraboschi.
"En 1990, Menem y Cavallo nos negaron el beneficio por supuesta falta de presupuesto y porque no estaban realizadas las listas con los soldados continentales del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea. Esa lista ya se hizo, la recibió el ministro de Defensa Arturo Puricelli y ya no hay más razones para demorar el reconocimiento", prosiguió.
Según precisó Fraboschi, los enrolados en la Fuerza Aérea ya recibieron los "honores" de ex combatientes por esa área de las Fuerzas Armadas y pueden gozar de la pensión. Sin embargo, los grupos que pertenecieron al Ejército y a la Armada siguen esperando ser reconocidos como veteranos de guerra.
El interlocutor de TOAS también recordó que esta asociación "tiene el apoyo de organizaciones de Derechos Humanos, el propio Ejército inglés reconoce las misiones que hicimos en el continente como acciones propias de una guerra".
(*) De la redacción de Perfil.com.