La carta de la presidenta Cristina Fernández de Kichner, en la que anunció al jefe de gobierno porteño Mauricio Macri que no asistiría a la reinauguración del Teatro Colón el próximo lunes 24 de mayo por "la increíble catarata de agravios recibidos", parecía un capítulo más entre el gobierno nacional y el de la ciudad.
Pero ¿qué efectos políticos tiene esta "escalada de crispación"? ¿Cómo afecta al gobierno nacional en su imagen tradicionalmente asociada a la confrontación, y al PRO en su discurso supuestamente más conciliador? ¿Quién se beneficia y quién se perjudica con esta disputa?
"Pienso que gana más Macri que Cristina", respondió a Perfil.com Rosendo Fraga, Director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría. Y argumentó que la Presidenta "tiene imagen negativa para la mayoría de la sociedad" y que el antikirchnerismo suma más que lo que resta, por lo cual "le da a Macri estatura de alternativa nacional".
"Es claro que el 'estilo K' es la causa del conflicto", opinó Fraga, ya que "es Cristina la que decide no ir cuando, en general, la gente no está de acuerdo con que el Bicentenario se utilice para dividir o como conflicto político, al mismo tiempo que no va al Tedeum en la Catedral por las diferencias con Bergoglio, y decide no invitar al Vicepresidente Cobos y a los ex presidentes Menem, De la Rua y Duhalde a la comida que se realiza con motivo del Bicentenario".
Artemio López, uno de los encuestadores favoritos de la Casa Rosada, opina distinto: el público, según su visión, toma este conflicto "como una especie de divertimento". "Son discusiones de alta peluquería", sostuvo -parafraseando al jefe de gabinete Aníbal Fernández- el titular de la Consultora Equis, en diálogo telefónico con Perfil.com.
Según López, la disputa sólo refuerza las identidades políticas existentes: "Los que están de acuerdo con Macri, coinciden con Macri; los que apoyan al gobierno, coinciden con Cristina; y los que no tienen opinión, siguen sin tenerla, miran esto como un espectaculo", dijo. El escándalo " no construye lealtades nuevas, no me imagino a nadie tomando posición a favor de alguno a raíz de esto", concluyó el encuestador.
Con el coincidió Graciela Römer, quien afirmó a Perfil.com que la disputa entre Macri y Cristina "perjudica y beneficia mutuamente a ambos". Según ella, "a los simpatizantes de Macri les refuerza la simpatia hacia él y la animadversión por el gobierno nacional, y con los simpatizantes de Cristina ocurre lo mismo, pero al revés".
Pero la consultora de Graciela Römmer y Asociados hizo una distinción: el conflicto "perjudica al conjunto de la gente y la dirigencia", por mostrar un enfrentamiento innecesario en lugar de un trabajo conjunto.