El diputado nacional del ARI, Eduardo Macaluse y la legisladora porteña de la misma agrupación, Liliana Parada, ratificaron hoy ante la Justicia federal las denuncias de intervenciones ilegales a líneas telefónicas de políticos y legisladores nacionales, bonaerenses y porteños, de la que acusan a la SIDE.
Macaluse y Parada concurrieron esta mañana al juzgado federal de Claudio Bonadío, que investiga una de las denuncias, y expresaron su convicción sobre la necesidad de que otra causa similar que se tramita desde hace meses en la ciudad bonaerense de Campana se traslade al tribunal de Comodoro Py, ya que atribuyen las "pinchaduras" de los teléfonos, a una dependencia de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). En la causa que tramita en Campana, se descubrió en una empresa telefónica de Garín el aparato que realizaba las interferencias telefónicas, que tenía la inscripción "Judiciales-Avenida de los Incas", una dirección del organismo dependiente de la Presidencia.
En declaraciones a la prensa, Macaluse destacó la "gravedad" de las escuchas, y afirmó que "queremos saber si hubo una orden política para escuchar" conversaciones, con "fines de persecución ideológica, o si hay gente que viene educada desde el Proceso para hacer escuchas que atañen no sólo a dirigentes de la oposición sino también del oficialismo".
Precisó que "no queremos dejar pasar ésto como algo natural, porque es gravísimo", al tiempo que aclaró que la denuncia "no la queremos convertir en una puja partidaria sino en una decisión institucional de defender que los poderes públicos puedan funcionar sin intereferencias".
Por su parte, la legisladora porteña Parada dijo que pidieron al juez Bonadío que cite a declarar al titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga, al subsecretario y que se abran los archivos. "A 25 años de democracia todavía pareciera que el espionaje no se termina, es alarmante", agregó Parada.
Además del hallazgo del aparato de "pinchaduras" en Garín, por el que supuestamente se escuchaban conversaciones de diputados y senadores bonaerenses, e incluso del ministro de Seguridad de la provincia, León Arslanián, el 16 de octubre pasado el líder de la bancada del PRO de la Legislatura porteña, Federico Pinedo, denunció "pinchaduras" a más de cien políticos.
Mencionó entre las víctimas de las escuchas telefónicas no sólo a los miembros de su bancada, sino también a los oficialistas Remo Carlotto y Rafael Bielsa.
Fuente: DyN