Por Pablo Javier Blanco (*)
En el radicalismo se viven horas decisivas. La interna en Diputados que dirimirá quién será el titular del bloque de la UCR, segunda minoría a partir del 10 de diciembre, se vuelve más áspera minuto a minuto y amenaza con romper la débil unidad que se cosechó el 28 de junio. De un lado, Oscar Aguad, actual titular de la bancada, apuesta a la participación de los cobistas y los catamarqueños para su reelección y ya convocó a los diputados electos por telegrama a votar el jueves en el Comité Nacional. Del otro, Ricardo Alfonsín asegura tener el aval firmado de 19 diputados y sostiene que no debe participar el que no esté afiliado al centenario partido.
"Ricardo estuvo reunido con dirigentes y diputados que están preocupados por la postura de Cobos", señalaron a Perfil.com desde el entorno de Alfonsín. La propuesta del vicepresidente consiste en darle un año más en la presidencia del bloque a Aguad y que luego sea reemplazado por el hijo del ex presidente. "No vamos a aceptar eso", le comentó Ricardito a sus íntimos. En el alfonsinismo, que representa al radicalismo de la resistencia, están a la espera de lo que decida el Comité; aguardan una jugada oficial que destrabe la situación.
Una fuente que participó de las discusiones describió a este portal las dos posturas dentro de la facción de Ricardito . "Están los moderados que buscan la intermediación del Comité y los gurkas, para quienes está en juego mucho más que el apellido Alfonsín". Lo cierto es que en el sector ven como los cerebros de la avanzada cobista a dos viejos radicales: Federico Storani y Leopoldo Moreau son sindicados como los principales promotores de la reelección del Milico, como llaman a Aguad quienes no lo quieren. " Freddy y Leopoldo, no lo pueden ni ver a Ricardo, no quieren ni que construya un rasti", se sinceró uno de los hombres del diputado electo.
Afiliados o no, esa es la cuestión. Toda la interna se reduce a una cuestión: si puede o no votar los cobistas de CONFE y los catamarqueños del Frente Cívico y Social, que responde al gobernador Eduardo Brizuela del Moral. Para los seguidores de Alfonsín, sólo deben votar los afiliados radicales y se amparan en el caso del ex diputado Simón Lázara, socialista, que entró al Congreso de la mano de la lista 3 y, a pesar de formar parte del bloque radical, siempre se abstuvo de votar por no estar afiliado al partido. "Si no están afiliados, por más de que hayan formado listas radicales no pueden votar", sentencian cerca de Ricardo.
" Aguad tiene 27 votos sobre 45, ya tiene asegurada la jefatura", detallaron a este medio desde las huestes de Aguad, donde agregaron que la "rama alfonsinista-moralista" insiste con que no voten los cobistas y los catamarqueños, "pero pierden un montón de poder y de Secretarías; pierden a lo bestia". En efecto, sin el CONFE y los catamarqueños el bloque de la UCR no alcanza las 40 voluntades que le abrirían la chance de conquistar más cargos, pero desde la oposición a Aguad argumentan que esos puestos pueden adquirirse con la posterior incorporación de diputados, negándose a que voten en la interna.
Los seguidores de Aguad, un cobista de la primera hora, reclaman que participen del sufragio, para el que ya se han enviado los correspondientes telegramas a todos los diputados electos. En ese sector apuntan sus armas contra Gerardo Morales y Elisa Carrió por lo que denominan "operaciones del prensa" contra Cobos, más que contra la figura del diputado cordobés. "Gerardo y Lilita operan ferozmente contra Cobos", denuncian.
2011. La pelea se centra en la figura de Cobos y su tan mentado regreso al radicalismo, del que fue expulsado de por vida tras integrar la fórmula que llevaba a Cristina Fernández de Kirchner a la Presidencia. "Cobos va por todo", afirman cerca de Alfonsín. "El que vota contra Aguad, vota contra Cobos", fue la advertencia que recibieron algunos diputados que bancan a Ricardito , aunque el propio vicepresidente se lo negó al bonaerense.
En ese contexto, el radicalismo es un hervidero, con reuniones en ambas partes y según pudo saber Perfil.com en la sede del partido se baraja la posibilidad de aplazar la elección del titular de bancada hasta la semana que viene para calmar los ánimos y evitar el quiebre. Sin embargo, el panorama no es el mejor: " La cuerda está muy tensa, demasiado, a punto de cortarse", reconocen en el alfonsinismo.
(*) redactor de Perfil.com