“Queremos salvar al radicalismo”, manifestó como premisa Gerardo Morales, candidato a vicepresidente por Una Nación Avanzada (UNA), concertación que encabeza el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, de cara a las elecciones del próximo 28 de octubre, en el marco de una entrevista que el senador jujeño brindó a medios digitales, entre los que estuvo presente perfil.com.
Allí, el presidente del Comité Nacional de la Unión Cívica Radical (UCR), además de manifestar su deseo de mantener el sistema bipartidista (radicalismo-justicialismo), que imperó en el país desde mediados del siglo pasado, no dejó tema sin analizar, en una charla donde criticó tanto al gobierno como a los otros candidatos de la oposición.
Oposición. En relación a los líderes opositores al gobierno, Morales intentó mostrar diferencias al señalar que con Lavagna, la UCR conformó un partido “orgánico”, que tiene como fin “salvar” al sistema de partidos.
“Con Lavagna formamos la decisión de un colectivo, dos convenciones, tres plenarios federales, no como (el gobernador radical de Mendoza, Julio) Cobos que decidió irse (del partido) con otros gobernadores”, que se alinearon con el kirchnerismo, señaló Morales.
En ese sentido, Morales afirmó su intención de “salvar a los dos partidos nacionales”, para no sufrir lo que sufrieron partidos menores que, según el senador jujeño, se sostenían en las espaldas de fuertes figuras carismáticas.
“Murió el líder del PI (Partido Intransigente) y chau. En la UCeDe murió (Álvaro) Alzogaray y chau”, manifestó Morales, quien preparó el terreno para apuntar sus cañones contra la fundadora de la Coalición Cívica (CC), Elisa Carrió, a quien acusó de hacer una “democracia de candidatos”.
“La Lilita, es Lilita; se revira mañana y arma un lío bárbaro; (el candidato a presidente por Recrear, Ricardo) López Murphy es López Murphy”, afirmó Morales, quien pese a todo reconoció que esta situación “tiene que ver con una crisis nuestra, no vamos a echarle la culpa a (Néstor) Kirchner.
Sin embargo, el candidato a vicepresidente arremetió contra el Presidente porque “utilizó esa debilidad (de los partidos) para poner plata, comprar nuestros dirigentes”, mientras que añadió que el proyecto de Kirchner es “fragmentar, obtener la democracia de candidatos; divide y reinarás”.
Coparticipación. Por otra parte, el candidato radical se interesó por la situación de la provincias, al destacar que “tenemos un estado nacional con superávit y después tenemos provincias pobres, salvo las petroleras; mire Buenos Aires”.
Morales resaltó el plan propuesto por Lavagna cuando era ministro, que manifestaba repartir el excedente del superávit, que ronda por los “17 mil millones” de pesos, lo que significaría “2 mil millones de pesos mensuales” para cada provincia, agregó el senador.
Retenciones e inflación. Por otra parte, tal vez sorpresivamente, Morales manifestó que si UNA llega a Balcarce 50, “no eliminaremos las retenciones a la soja, ni el impuesto al cheque”, aunque sí se mostró a favor de quitarle presión impositiva a los productores de “hortalizas, tabaco y algodón”. Sin embargo, Morales obvió referirse a la situación de los ganaderos.
Con respecto a las retenciones, el candidato a vicepresidente señaló que impulsarán un plan para que la mitad de las retenciones sean destinadas para la construcción de obras públicas en las provincias del interior.
“Se repartirá la mitad de las retenciones en obras de infraestructura”, afirmó Morales, quien criticó al ministro de planificación, Julio de Vido, al señalar que actualmente “se está gastando toda la guita”, mientras que se agregó: “¿En qué se la gasta? No hicimos ninguna obra para generar 1000 mega vatios que necesita el país”.
Crítica al tren bala. Al respecto, Morales apuntó contra el anuncio del gobierno sobre la construcción de una formación de alta velocidad. “Hagamos un tren bala cuando hagamos el tren de Rosario a Buenos Aires, que nos trasladaba en 3 horas 45”.
La relación de Cristina con la prensa. Finalmente, Morales manifestó que para UNA “es central el vínculo institucional” con los medios de comunicación, al mismo tiempo que consideró que la primera dama, Cristina Fernández, no atiende a los periodistas argentinos porque “cree estar más arriba que los normales”.
A su vez, cuando se le preguntó sobre la creación de una nueva Ley de Radiodifusión (la actual fue sancionada por la última dictadura militar), intervino la jefa de Prensa del senador, quien manifestó, como dato anecdótico (aunque relacionado a negocios de millones de dólares), que no es casualidad que Cristina le haya brindado una entrevista a la revista Times en los Estados Unidos, “24 horas antes de que el Grupo Turner (al cual pertenece la publicación) firmara su ingreso al negocio de los medios de comunicación en la Argentina”.