En Salta, la tierra del sol, el domingo comenzó nublado y lluvioso, pero fue el clima el único que no colaboró con las elecciones para elegir cargos en todos los niveles de gobierno, desde concejales hasta gobernador.
A media tarde ya votaron los tres principales candidatos. El primero en llegar a las escuelas fue el diputado provincial Alfredo Olmedo, empresario agropecuario que dos años atrás se hizo un lugar en la política salteña a fuerza de costosas y coloridas campañas proselitistas. En la pequeña localidad de Las Lajitas, a 240 kilómetros de la capital, Olmedo emitió su voto con el sistema de boletas de papel que utiliza el 66% del padrón y que se planea será desplazado en esta provincia en 2015 por el voto eléctrónico. El principal opositor, segundo en las últimas encuestas, afirmó a la prensa que "es un domingo trascendental para Salta donde estoy seguro que la historia de la provincia va a ser otra".
Su voto estuvo lejos de las expectativas mediáticas. La sobriedad de sus declaraciones contrasta con la agresiva campaña contra el oficialismo que emprendió hace más de un año, cuando anunció su intención de ser gobernador de Salta.
También a la mañana votó Walter Wayar, tradicional hombre de la política provincial que supo ser vice gobernador del actual senador Juan Carlos Romero en su último período al frente del Ejecutivo provincial. Wayar también se caracterizó por la tibieza de sus declaraciones luego de votar: “estoy contento, tranquilo y con fe. Las elecciones fortalecen la democracia”.
La lista de Wayar recibió un apoyo de Cristina Fernández y del jefe del gremio de Camioneros Hugo Moyano, ya que su alfil en la región, Jorge Guaymás, es el vice de la fórmula.
El más mediático, sin dudas, fue el gobernador Juan Manuel Urtubey, quien llegó a la escuela 25 de mayo de la capital para votar en la mesa 1722 después del mediodía. Improvisando una pequeña conferencia de prensa en la puerta del colegio y atendiendo a periodistas y ciudadanos que se acercaron para hablarle durante todo el trayecto hacia la cola de su mesa, el actual gobernador repitió algunas frases que lo pusieron en la primera plana de todos los diarios del país, con las cuales reforzó un temporal alejamiento del gobierno nacional para poder capitalizar en soledad una posible victoria anunciada por todos los encuestadores. “No se elije un delegado del gobierno nacional, se vota un Gobernador”, explicó a los múltiples medios que lo entrevistaron.
El mandatario sufragó en una escuela que cuenta con voto electrónico, el sistema utilizado por primera vez en una elección masiva en nuestro país y que en Salta utilizará un tercio de los 800 mil votantes.
De este modo, las largas colas que generaron las esperas por el desconocimiento o la dificultad de los votantes para utilizar el nuevo sistema enfurecieron a muchos concurrentes, que debieron soportar tediosas y largas esperas en las escuelas. Sin embargo, el Tribunal electoral confía en que la población se adapte rápidamente al voto electrónico y que en 2015 pueda ser utilizado por el 100% del padrón. También estas máquinas permitirán un rápido recuento, por lo cual se espera que aparezcan las primeras tendencias a las 8 de la noche, cuando el gobernador planea dar una conferencia de prensa.