Diego Santilli llega a la redacción de PERFIL en medio de una fuerte lluvia. Metido de lleno en la campaña porteña, donde buscará revalidar su título de vicejefe de Gobierno, habla de las elecciones. Se lo ve cansado pero habla de su rol a cargo de la seguridad y asegura que el delito “bajó” en la Ciudad. “Estamos haciendo la mayor transformación” de la Ciudad de los últimos cincuenta años, dijo y vaticinó que ganarán las elecciones, pero en la segunda vuelta. “Con las PASO, imagino una elección de tres vueltas”, manifestó.
En las elecciones porteñas, para evitar la segunda vuelta el ganador necesita el 50 por ciento más uno de los votos, algo que, aclara Santilli, “nunca pasó”. Solo en 2000 no hubo segunda vuelta pero no por una cuestión de números: Aníbal Ibarra superó el 49% y su rival, Domingo Cavallo, decidió bajarse ya que había obtenido poco más del 20%.
Por otro lado, Santilli consideró que al presidente Mauricio Macri hay que renovarle el voto de confianza porque sentó “los cimientos de una Argentina sólida”. El vicejefe admitió que el oficialismo subestimó la solución a la inflación y afirmó que la diferencia entre lo que Macri prometió en campaña en 2015 y lo que terminó pasando en su gobierno (a nivel de pobreza, precios, despidos) tuvo que ver con la situación en la que encontraron el gobierno cuando asumieron.
También sugirió que parte de la decepción está relacionada con que la gente no pudo palpar el nivel de la crisis que había dejado el kirchnerismo. “No fue como en 2001, que el país quebrado terminó con una crisis que la gente palpó. En 2015 hubo una crisis con una dimensión extraordinaria, con una sensación de impunidad y corrupción en toda la Argentina. Pero la gente no lo pudo ver”, afirmó.
Consultado sobre las tarifas, en especial las de la electricidad, planteó: “No va a resolverse en cuatro años un problema de falta de energía de muchos años. Hay un progreso año tras año. No tenés los cortes de antes, ni el problema de gas de antes. Del apagón se tienen que hacer cargo las empresas. Pero el problema de la Argentina es la energía. Sin energía no hay laburo, sin energía la Argentina no puede funcionar”, analizó Santilli. Para el vicejefe, “estábamos acostumbrados a ver los generadores en toda la Ciudad de Buenos Aires y eso ya no pasa”.
Inversiones e inflación. Paralelamente, consideró que no se subestimó “la lluvia de inversiones”. “Inversiones hubo y hay. Las inversiones es una matriz más que abordó Macri. Y se han hecho en Vaca Muerta, en minería. También tocó la matriz del turismo y aumentó un 50% la capacidad de asientos en vuelos”.
Sobre la inflación, dijo que es un problema de “ochenta años que tiene sus porqués. Un Estado que gasta de más, por ejemplo, o un retraso en las tarifas. Macri los fue abordando todos. La inflación va a llevar tiempo resolverla. Se subestimó el tiempo en el que se podía resolver”, precisó. “Sabemos que es duro, que hay gente que no llega a fin de mes, que le cuesta. Pero al mismo tiempo sabemos que es el camino y la gente también lo cree”, manifestó.
Gestión. Sobre la rotura constante de veredas. Santilli reconoció que hay reparaciones permanentes y que hay veredas que se rompen y arreglan varias veces en un mismo año. “No es solo una sensación de la gente: es una realidad. Las rompen las empresas de servicios que tienen que cambiar toda la red que va por el subsuelo de la Ciudad. Hay caños de Aysa, por ejemplo, que tienen cien años de antiguedad y no sirven más. Lo que sí ocurre es que a veces las rompen y no las arreglan bien”, explicó. “El que la rompe la tiene que dejar tal cual estaba”, aclaró.
Sobre la Línea F del subte. El vicejefe de Gobierno dijo que la nueva línea de subte todavía no está por construirse. “Lo que se licitó ahora son los estudios de energía para poder hacerlo. A partir de eso, encontraremos el financiamiento para poder efectuarlo. La ejecución depende: si la encarás con dos tuneladoras puede ser en un año, si la hacés con menos, tres o cuatro años”.
Seguridad. Santilli resaltó que se triplicó la cantidad de agentes en la calle y el patrullaje. Además, manifestó que hay un 100% de monitoreo sobre vehículos. “Bajó el homicidio doloso en un 30% y capturamos a 1.200 prófugos con el sistema del reconocimiento facial”. “Pero ese sistema es cuestionado por la invasión a la privacidad y por los falsos positivos”, sostuvo PERFIL. “Falsos positivos hubo cuatro. Nosotros buscamos solo sobre la base de prófugos. Lo garantizan el sistema y el protocolo, que es auditado por la oposición desde la Defensoría del Pueblo”, se defendió.
Por otro lado, sostuvo que las pistolas Taser son utilizadas por el 70% de las fuerzas de seguridad del mundo y que son menos letales. “¿Cómo hacés si alguien saca un cuchillo? Es mejor disparar con una descarga eléctrica que con un tiro en la pierna”, aseguró.