Con el agua bajando en los distritos de la provincia de Buenos Aires y los evacuados regresando a sus hogares tras la inundación, Daniel Scioli retomó ayer la pelea electoral con su principal competidor a la presidencia, Mauricio Macri, con quien marcó diferencias en el tema económico: “El jefe de la alianza reveló sus convicciones”, dijo el postulante del Frente para la Victoria sobre la posición planteada por su competidor de Cambiemos respecto de que el precio del dólar debe ser fijado por el “mercado”.
Aunque Scioli llega a octubre con una diferencia de 14 puntos sobre el jefe de Gobierno porteño, necesita estirar la diferencia para asegurarse una victoria en octubre y no tener que enfrentar la segunda vuelta. Por ello, el “operativo seducción” está en marcha e incluyó una propuesta a Sergio Massa para reunirse.
El jueves, el gobernador bonaerense llamó al gobernador José Manuel de la Sota, quien compitió contra Sergio Massa. Le agradeció por su “responsabilidad” en el tratamiento de las inundaciones y lo invitó a reunirse. Pero la invitación no fue cursada sólo para el cordobés, sino también para Massa.
Ese mismo día, el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández le aseguró al candidato a presidente de UNA que también recibió el llamado de Scioli. En el búnker massista aseguran que no son los únicos llamados que comenzaron a recibir desde el oficialismo (además del de los dirigentes macristas), los que llegarían incluso a una conversación telefónica entre el empresario kirchnerista Rudy Ulloa y el aliado de Massa Jorge Brito.
En el sciolismo creen que la mitad de los sufragios que consiguió el tigrense (14%) podrían irse al Frente para la Victoria, por lo que pasaría el 45% necesario para ganar en primera vuelta sin importar la diferencia con el segundo.
Massa vuelve a resistir y seguirá en la carrera presidencial. Para empezar a hablar, pide que le aseguren que Scioli quiere ver a los corruptos presos, asegurar el 82% móvil y barrer con los “ñoquis de La Cámpora”. Al macrismo, que pide su apoyo, le dice que el jefe de Gobierno porteño debe estar dispuesto a anunciar que si Massa llega al ballottage, él lo apoyaría.
Lo que el agua dejó. Ayer, la Policía Bonaerense implementó un fuerte operativo en el barrio de Villa La Ñata. Los uniformados se apostaron en las inmediaciones de la casa del gobernador “teniendo en cuenta la posible concentración numerosa de manifestantes y la comisión de posibles ilícitos”, según consta en el parte policial por el que se afectaron cien efectivos de la División de Infantería y 15 de Prevención del Delito. A pesar del fuerte operativo, apenas llegó a La Ñata un solo colectivo con afectados por las lluvias de la zona norte que reclamaron por obras. Y una treintena de manifestantes fue frenada por la policía. Ayer, Karina Rabolini intervino en el territorio afectado por las inundaciones al recorrer un centro de ayuda. La mujer del gobernador bonaerense continuará teniendo un rol protagónico en la campaña ya que, según reconocen en el sciolismo, la performance electoral de Scioli mejoró en los pueblos que visitó.
