AGENCIAS
La advertencia de la Iglesia sobre el avance del narcotráfico no pasó inadvertida. Desde el gobernador kirchnerista Daniel Scioli hasta legisladores de la oposición, distintos sectores políticos coincidieron ayer con la preocupación del Episcopado, que alertó sobre el aumento del tráfico de drogas en la Argentina.
Las declaraciones fueron una reacción a un duro documento de la cúpula eclesiástica, en donde señala que el país podría parecerse a México y a Colombia. La asamblea anual de obispos apuntó a la “complicidad de fuerzas de seguridad, funcionarios de la Justicia y políticos que colaboran con la mafia enquistada”.
Uno de los primeros en contestar fue el responsable de la provincia de Buenos Aires, uno de los distritos más golpeados por el narcotráfico. En una respuesta con tono a defensa, Scioli señaló que comparte “la preocupación de la Iglesia frente a este flagelo”.
Sin embargo, el mandatario enseguida se apuró a ensalzar su gestión en ese tema. “A partir de la lucha que le hemos dado y la persecución permanente a estos narcos, se han ido desplazando a otros lugares del país, como pasó también en Latinoamérica”, aventuró.
La oposición no está de acuerdo con ese optimismo. El diputado radical Miguel Bazze, vice de la Comisión de Seguridad Interior, pronosticó: “Se avanzará inexorablemente en la cartelización y en el dominio absoluto de territorios por parte de distintos grupos. En cada región, utilizando la violencia y el crimen, se convertirán de hecho en la autoridad”.
En el mismo sentido, el ex jefe de la SIDE Miguel Angel Toma aseveró que Argentina “es el tercer exportador de América Latina de droga, especialmente de cocaína, porque el país tiene la frontera como un colador”. El ex funcionario de Eduardo Duhalde reclamó “reconstruir la relación” de los órganos de seguridad locales con los internacionales.
El Frente Amplio Progresista también opinó sobre el tema. El diputado bonaerense Juan Carlos Juárez señaló como “vergonzoso” que la Iglesia “deba pedirle al Gobierno que luche contra el narcotráfico”. El legislador recordó que “el Ejecutivo nacional lleva más de diez meses sin nombrar al reemplazante de Rafael Bielsa al frente de la Sedronar”, el organismo que debe luchar contra el tráfico de drogas.
Después de este duro informe de la Iglesia, ayer se reunieron con la pastoral social distintas figuras políticas de diversas fuerzas. Entre ellas estuvieron el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez, el titular de la CGT Hugo Moyano y el diputado del PRO Federico Pinedo