El Gobierno trata de poner fin a la incertidumbre sobre el futuro de los empleados de las AFJP que, tras el anuncio de la estatización de las jubilaciones, se sienten a la deriva e incluso expresaron su bronca con una manifestación en Plaza de Mayo, con un festival de pancartas contra la Presidenta. Es por eso que hoy se presentará un padrón para que todos los empleados se anoten para su posterior reubicación en puesto del Estado. Todos, menos los gerentes y directivos, según informa el diario Ámbito Financiero.
Esta tarde, cuando el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, se reúna con directivos de las entidades que agrupan a los bancos, el Ejecutivo tratará de desprenderse de la responsabilidad de absorber la totalidad de empleados de las AFJP. En los planes oficiales, se calcula que sólo el 50% de los empleados pasaran al Estado, por lo que se presionará para que las entidades financieras reubiquen a ese otro 50% dentro de los bancos ligados a las AFJP.
Quienes han quedado en off -side tras la medida son los directivos y gerentes de las cajas jubilatorias privadas, un total de 400 personas cuyos sueldos superan los 10 mil pesos mensuales, para quienes no hay lugar ni sueldo dentro del Estado. La prioridad de la gestión CFK serán los promotores y empleados administrativos, luego los empleados de la superintendencia de AFJP, y por último los analistas y especialistas económicos y provisionales.
Así las cosas, Tomada y el titular del ANSeS, Amado Boudou, esperan que esos empleados sean transferidos a los bancos dueños de AFJP, entre los que están el BBVA (Consolidar), Credicoop (Previsor), HSBC (Máxima), ING (Orígenes) y Met AFJP (Met).