La detención de Marcelo Balcedo en Uruguay, por pedido de la Justicia argentina, derivó en un nuevo obstáculo para el sindicalista, ya que en los tribunales del país vecino ahora lo investigarán por posibles delitos cometidos allí.
La jueza penal uruguaya Blanca Riero derivó con “carácter urgente” la información que surgió de la detención de Balcedo a un juzgado de Crimen Organizado. Entre ellos, figuran los datos sobre el efectivo que se encontró al momento de la captura, que rondaría los 500 mil dólares, las armas y municiones y vehículos de alta gama. Se agregó a esta pesquisa el hallazgo de cinco llaves de cajas de seguridad de distintos bancos junto a una carta escrita a mano que detallaba el dinero que habría en cada una de ellos y que, según el escrito, serían unos 7 millones de dólares.
Ahora, Crimen Organizado explorará sobre el modo en que esos bienes ingresaron al país y los movimientos de dinero que anteriormente pudo haber hecho Balcedo en Uruguay. Para ello, la Secretaría Antilavado colaborará con la jueza y aportará datos elementos con los que ya cuenta, ya que había sido contactada anteriormente por la Justicia argentina en plena investigación. En lo inmediato, el sindicalista platense y empresario de medios podría quedar procesado en Uruguay. Sería por el ingreso de armas de guerra que no habrían sido declaradas. Si esto sucede, Balcedo podría cumplir la pena por este delito en el vecino país y recién después ser extraditado a la Argentina.Mientras la Justicia uruguaya y argentina avanzan, los abogados del dirigente presentaron un recurso para que él y su mujer, Paola Fiege, fueran liberados. Esta solicitud fue rechazada por la jueza ya que “se dan los requisitos exigidos por el ordenamiento jurídico para disponer la prisión preventiva”.
Chacra. El sindicalista vivía en la lujosa chacra “El Gran Chaparral” en Playa Verde desde hacía seis años, junto a su mujer y sus tres hijos de 11, 4 y 2 años. A pesar del bajo perfil que la familia tenía allí, también supo construir relación con el poder local.
Balcedo también comienza a estar en la mira por esos vínculos por los que podría haber sido beneficiado incluso por la construcción de la chacra. Desde hace años, un grupo de vecinos que cuida la zona, por haber sido declarada Monumento Histórico Nacional, mantiene diferencias con la familia del gremialista. Sucede que las tierras que compró Balcedo forman parte de la zona de interés arqueológico ya que el Cerro de Los Burros en donde se encuentra la chacra es una región que evidenció la ocupación prehistórica más antigua de todo el territorio nacional.
Los lugareños se quejan de que con el perímetro que creó alrededor del predio, la construcción de la casona y el asfalto se “arrasó sin miramientos sobre un monte nativo” y desde la Comisión de Vecinos del Cerro de Los Burros aseguran que no habría habido un monitoreo de la Dirección de Medio Ambiente de las obras en una zona sensible por la riqueza natural que alberga.
Además, explican que se incumple con la legislación local como es la libre circulación por caminos que son de libre tránsito (caminos vecinales) que quedaron dentro de la propiedad por lo que ya los ciudadanos no pueden acceder
Los tres hijos quedaron al cuidado de la tía
Los abogados de Paola Fiege solicitaron la eximición de prisión de la mujer de Marcelo Balcedo y sugirieron que le pusieran una tobillera electrónica con la obligación de presentarse ante la fuerza de seguridad todos los días, ya que debe cuidar de sus tres hijos. Sin embargo, el pedido fue rechazado y ahora es su hermana, Belén, quien se hizo cargo de los pequeños hijos de la pareja.
Belén había llegado a Uruguay antes de que detengan a su hermana. Incluso, en las redes sociales días antes le dedicó un posteo: “Admítelo, lo mejor que te pudo pasar, es que yo sea tu hermana”. El viernes volvió a usar las redes sociales para enviar el mismo mensaje que se dio en la tapa del diario Hoy, propiedad de Balcedo y el cual Paola dirigía. “Libertad de expresión!”!, publicó.
Paola tiene tres hermanos menores, los cuales viven entre La Plata y Posadas. El nombre de uno de ellos, Cristian, aparece en el informe de Unidad de Información Financiera en el que se basó el juez para avanzar en las detenciones, ya que fue presidente de la sociedad Emprendimientos Publicitarios Bonaerenses, una de las empresas investigadas como posible destinataria del dinero que se retiraba del sindicato Soeme.
En 2016, Cristian se recibió de abogado y ahora se interiorizó de la causa que involucra a su hermana y es quien lleva tranquilidad a la familia.