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Los gremios docentes, de la salud y municipales renovarán su presión en los próximos días para intentar reabrir las paritarias en febrero solicitando un aumento superior al 30%, y ya evalúan futuras medidas de fuerza. En el mismo sentido reclaman tanto la CGT de Hugo de Moyano como la CTA disidente. Como contrapartida, el Gobierno –si bien desechó la idea de poner un techo a las paritarias– les adelantó a varios sindicatos que planeaba una estrategia para que las paritarias se firmen por dos años con la posibilidad de una reapertura en un año.
Así lo confirmó a PERFIL Roberto Baradel, del Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación bonaerense (Suteba): “(El jefe de Gabinete, Jorge) Capitanich nos planteó una negociación en dos años con reapertura en el medio, y nosotros le planteamos que sea de seis meses y evaluar el desarrollo de la economía en esos meses”. Eduardo López, secretario gremial de Ctera, se mostró más cauto: “Depende del porcentual. Puede ser semestral, anual o bianual. Nosotros sólo planteamos el adelantamiento de la paritaria”.
“Está loco si habla de dos años. Con una inflación como ésta no se puede ni soñar con eso”, dijo Pablo Micheli, de la CTA disidente. “Hay una situación no saldada de fin de año, y seguramente se va a adelantar la discusión de la apertura de paritarias. En este cuadro, febrero va a ser muy conflictivo. De hecho hay varias provincias con paro de estatales. Las cosas no cerraron del año pasado”, completó Micheli. La CTA disidente y la CGT de Moyano comenzaron a discutir una serie de acciones conjuntas que se materializarían en febrero. “Además estamos en estado de alerta y movilización; el gobierno nacional no tiene reflejos para reaccionar ante esto, y las provincias mucho menos”, concluyó.
Desde Ctera también están solicitando el adelantamiento de la paritaria nacional. López planteó que insistirán aunque “de parte del Gobierno no hay nada”. “Capitanich quedó en contestar sobre la convocatoria. Si el aumento es insuficiente no empezarán las clases, ya sea en la Ciudad, en la provincia o a nivel nacional”, dice López, y aunque no quiso arriesgar cifras, advirtió: “Nunca firmamos acuerdos por debajo de lo que consideramos la inflación”.
En cuanto a los médicos, el secretario general de AMRA (Asociación de Médicos de la República Argentina), Erick Mendoza Díaz, dijo que van a estar “en estado de alerta y movilización”. “Desde hace cuatro años venimos rezagados, nuestro reclamo va a estar arriba del 30%. Los hospitales públicos se van a quedar sin médicos en las guardias porque van a querer irse a consultorios privados”, apuntó.
Uno de los escenarios más complejos es la provincia de Buenos Aires. Baradel contó que pidieron una reunión con Daniel Scioli y nunca la concedió. “Tenemos un salario inicial de $ 3.600 cuando en Santa Fe están en $ 5 mil. Tiene que haber una equiparación previa a la paritaria”, expresó. Pedirán entre el 30 y el 35%, y hay buenas chances de que las clases no comiencen. Los médicos adelantaron que le elevarán a Scioli un petitorio y extenderán un pedido para un bono de $ 3 mil.
