Sindicatos y organizaciones sociales argentinas participarán el 23 y 24 de noviembre de una cumbre que tendrá como lema: “El Trabajo y el Movimiento de los Trabajadores en el Centro del Desarrollo Humano Integral, Sostenible y Solidario: ¿Por qué el mundo del trabajo sigue siendo la clave del desarrollo en el mundo global?”. Según pudo saber PERFIL de fuentes vaticanas, no habrá un encuentro privado con los gremialistas argentinas, aunque no se puede descartar un saludo en el marco de la reunión. En el Vaticano cuentan que el jefe de la Iglesia no quiere verse involucrado en asuntos domésticos.
Héctor Daer, Juan Carlos Schmid, Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez, Omar Viviani, Abel Frutos y Juan Pablo Brey serán los representantes de la CGT; por las dos CTA estarán Pablo Micheli y Hugo Yasky, mientras que la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) llevará a su secretario, Esteban “Gringo” Castro.
Desde la Santa Sede aclaran que los argentinos representarán a uno de los más de 40 países que estarán presentes en la cumbre, para evitar lecturas de tono doméstico porque la reunión coincide con los tirones por la reforma laboral. El espíritu del encuentro, explican, busca “construir una sociedad más fraterna, justa e igualitaria que coloque al trabajo humano como centro y clave del progreso”.
El encuentro se realizará en la Nueva Sala del Sínodo del Vaticano. Allí, anticipan desde la Santa Sede, los más de 200 representantes gremiales debatirán y compartirán experiencias de las organizaciones sindicales y acordarán “compromisos para la construcción de una sociedad basada en la dignidad de las personas y de los pueblos”.
El cardenal Peter Turkson es el organizador de esta cumbre, como presidente del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede. El encuentro coincide con coincide con los 50 años de la publicación de la encíclica Populorum Progressio del papa Pablo VI, donde el antecesor de Francisco apuntó contra las injusticias sociales.
En Febrero, se había acordado una visita del triunvirato y un encuentro con el Papa pero el Pontífice suspendió el encuentro tras la difusión de la cumbre en Perfil, y la confirmación pública de la misma por parte de distintos secretarios generales. En 2013, Francisco recibió a una delegación en un gesto en favor de la unidad de la CGT, que por entonces estaba dividida entre oficialistas y opositores. En las últimas semanas, mantuvieron encuentros con Francisco Julio Bárbaro y Pino Solanas. Pablo Moyano, en tanto, lo saludó durante la audiencia de los miércoles. El equipo de difusión del dirigente Camionero contó que le dijo al pontífice que pensaba resistir los cambios en la normativa laboral que impulsa el Gobierno.