La familia Moyano se aferró al hermetismo a dos días de la repentina muerte de Patricia Villares, segunda esposa de Pablo, secretario adjunto del Sindicato de Choferes de Camiones e hijo del líder de la CGT.
"No sabemos qué pasó. Estaba lo más bien, no entendemos nada. Todo lo que están diciendo en los medios son estupideces”, dijo a PERFIL un allegado a Hugo Moyano con la voz quebrada.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite
Según fuentes policiales citadas por Télam, Villares, quien tenía 37 años (aunque algunas fuentes aseguran que era algo mayor), falleció en el Sanatorio 15 de Diciembre II, del Sindicato de Camioneros, ubicado en Zeballos 833, en Avellaneda, a donde había sido trasladada de urgencia en la mañana del jueves.