Tabaré Vázquez acusó al Gobierno argentino de no querer dialogar

El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, aseguró que la determinación de habilitar el comienzo de actividades en la pastera Botnia no fue una respuesta al contacto del presidente argentino Néstor Kirchner con los asambleístas de Gualeguaychú en plena Cumbre Iberoamericana y que la decisión no la tomó de manera “apresurada”. Además, apuntó directamente a las autoridades Argentinas y acusó al Gobierno de no querer dialogar.

“La decisión de habilitar en la noche del jueves el funcionamiento de Botnia es la culminación de un proceso que tuvo varios componentes”, expresó el mandatario uruguayo al diario oriental La República . “Botnia cumplió con todos los requisitos contemplados en nuestra legislación y por eso está habilitada y, cómo es público, fue postergada su habilitación para facilitar el diálogo.”, buscó aclarar Tabaré.

"El 1 de noviembre recibí en Los Ángeles (mientras realizaba una gira por Estados Unidos) una llamada del canciller español, Miguel Ángel Moratinos, pidiéndome que postergara la habilitación de Botnia", explicó.

"En esa llamada Moratinos me propone que en el marco de la Cumbre Iberoamericana realicemos en Chile una reunión de un equipo de técnicos para avanzar y buscar salidas. Inmediatamente le respondemos que aceptamos la propuesta y postergamos la habilitación de la planta, como un nuevo gesto de buena voluntad", añadió.

El mandatario uruguayo expresó que su Gobierno tuvo intenciones de dialogar con Kirchner antes de la Cumbre Iberoamericana, pero “ extrañamente, la comitiva argentina llegó con la instrucción de no reunirse", disparó.

Luego de varios intentos para abrir algún canal de diálogo, finalmente, según el presidente uruguayo, se concretó una reunión de los técnicos, pero no se alcanzó " ningún avance".

"Ante esa situación, la negativa a la reunión de los equipos técnicos durante varios días, la negativa argentina a una reunión de los dos presidentes en conjunto con el rey de España, la falta de avances en la reunión de los cancilleres, es que entendemos que no había razón para mantener la postergación del permiso a Botnia", alegó.

Vázquez sostuvo que la habilitación a operar "es una decisión soberana del Uruguay y de su gobierno. Debía informar al gobierno y al pueblo uruguayo y así lo hicimos. Es una decisión soberana", insistió.

Nuevamente, y a pesar de las acusaciones argentinas que apuntan a que el Uruguay tomó decisiones “unilaterales” Vázquez insistió en que su gobierno está dispuesto al diálogo. "Esta es una situación que a mi me provoca una gran tristeza, tengo la esperanza que la madurez del pueblo argentino y la madurez del pueblo uruguayo nos permita encontrar una salida", dijo el mandatario.