Mientras esta tarde el Senado sesionaba, con la idea de convertir en ley el proyecto del Poder Ejecutivo de promoción de la exploración y la explotación de hidrocarburos, un grupo de militantes de la agrupación Quebracho arrojó bombas de olor en el recinto. Se frenó la sesión y pasaron a un cuarto intermedio.
El incidente se produjo a minutos de comenzar la sesión y mientras hablaba el justicialista chaqueño Jorge Capitanich. Además de las bombas de olor, los militantes de Quebracho también arrojaron panfletos y huyeron del palco en el que estaban ubicados.
El cuarto intermedio fue pedido por los legisladores para ventilar el recinto y, a los quince minutos, se reinició el debate.
Poco después, las autoridades del Senado difundieron un pedido de ingreso de los militantes, quienes solicitaron autorización para presenciar la sesión haciéndose pasar por estudiantes de la facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de La Plata.
El secretario parlamentario del Senado, Juan Estrada, aclaró que "siempre se dejan ingresar estudiantes a las sesiones", y dijo que "esta gente vino con mala intención y mala fe y aprovechando que somos tolerantes han hecho este episodio lamentable".
El episodio podría generar una acción judicial en contra de los protagonistas de los disturbios, ya que quedaron registrados sus nombres, sus documentos de identidad y sus fotos. Sin embargo, ninguno de ellos fue detenido antes de que abandonaran el Palacio Legislativo.
El proyecto del Poder Ejecutivo intentará crear un “Régimen Promocional para la Exploración de Hidrocarburos”, que se aplicará en todas las provincias y en la plataforma continental, otorgando nuevas áreas y beneficios impositivos a las empresas que opten por adherirse a la propuesta.
El régimen promocional, que obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados hace un mes, prevé la distribución a cargo de las provincias y de la Nación de nuevas áreas de exploración y la devolución anticipada del IVA en las inversiones de bienes de capital que realicen las empresas petroleras.