El empresario tabacalero Carlos Tomeo investigado por ser el presunto testaferro de Aníbal Fernández y por evasión de impuestos negó tener vínculos con políticos, afirmó que tiene todo el dinero declarado y relativizó su fortuna: "No sé si soy millonario, vivo bien".
Ante la denuncia de la diputada Elisa Carrió que lo sindica como testaferro del exjefe de Gabinete K, Tomeo descartó conocer al político y negó que hayan cursado materias en la Universidad de Lomas: "No lo vi en mi vida, no tenemos vinculación política", marcó.
El empresario se mostró tranquilo, en una entrevista con radio La Red, ante el millonario hallazgo en el country Abril. "Se explica porque está todo declarado, presenté la documentación en el juzgado federal. No es que soy monotributista, . Trabajamos, cumplimos y pagamos", señaló.
Tomeo explicó que "la pegó con la tabacalera" y también amasó su fortuna con ventas de inmuebles y vehículos, aunque dudó al calificarse como millonario: "No sé si soy millonario, vivo bien", manifestó.
Sobre el allanamiento, el empresario aseguró que el dinero estaba en la casa de su consuegro era para cubrir obligaciones. "No tenemos grandes cajas de seguridad", explicó.
Tabacalera y otros negocios. Tomeo es un empresario con catorce años de trayectoria y con intereses en sectores diversificados. Además de la Tabacalera Espert posee cuatro hoteles (tres en San Martín de los Andes y uno en San Bernardo) y, además, administra empresas.
Su incursión en el rubro tabacalero se dio de la mano de una poderosa familia paraguaya: los Bo. Tomeo fue durante años abogado de la millonaria familia y lo asesoraron para que dé sus primeros pasos en el negocio.