Perfil bajo y poca exposición pública ha sido la consigna de Ricardo Jaime en los últimos meses. Previo al sorpresivo pedido de detención, por parte del juez federal Claudio Bonadío, el ex dirigente kirchnerista sufrió el ostracismo político, y se refugió en su familia para hacer frente a la numerosa cantidad de causas en su contra.
La casa familiar ubicada en el country Cuatro Hojas de la ciudad de Mendiolaza, cercana a la capital provincial y su lujosa vivienda en la denominada “Costa Azul”, de Carlos Paz, fueron sus reductos preferidos, por eso no sorprendió que los primeros movimientos de la policía apuntaran hacia estos domicilios que siempre estuvieron en la mira de la Justicia.
En su acta de procesamiento, de hecho, Bonadío pidió que la Policía Federal fuera a buscarlo a su casa de Carlos Paz. Ayer los abogados de la defensa dijeron que Jaime no se entregará hasta que la Cámara Federal confirme si avala la decisión del juez de encarcelarlo.
Antes de la orden de detención, Jaime procuró mantenerse en actividad física. El deporte siempre fue un pilar en su rutina diaria. Largas caminatas, y paseos en bicicleta fueron la manera que encontró Jaime de “desenchufarse” de su difícil situación. El ex funcionario supo participar de campeonatos amateurs de fútbol y hasta alcanzó el rango de cinturón negro en karate, disciplina que lo apasiona.
Las últimas apariciones públicas del ex secretario de Transporte entre 2003 y 2009 se dieron en Córdoba. El pasado sábado nueve de febrero, PERFIL descubrió a Jaime en la disco Zebra, una de las más exclusivas de Villa Carlos Paz, y la preferida de los artistas que hacen temporada en las sierras. En esa noche, se presentaba el grupo Los Auténticos Decadentes, y el ex dirigente llegó acompañado de Claudia, su novia, con quien compartieron algunas copas de champagne en el vip de la disco. Las fotos no le cayeron bien y desde aquélla oportunidad Jaime optó por salidas en marcos mucho más cuidados.
Políticamente, la presencia de Jaime sorprendió en un evento kirchnerista, el pasado 25 de abril, en el que el Frente para la Victoria presentaba a sus nuevas autoridades en un búnker de la capital provincial. En el acto, encabezado por la nueva presidenta del partido, la diputada Carmen Nebreda, se mostró junto a Diana Conti y su presencia fue duramente criticada por los medios. “Me llama la atención la hipocresía de los medios. Yo, simplemente como un ciudadano más, voy a una unidad básica o un acto como militante político y pareciera ser que es un delito”, argumentó en esa oportunidad.
Ricardo Jaime continúa en contacto con la dirigencia kirchnerista provincial y nacional, pero nadie reconoce estos acercamientos. Un encumbrado dirigente cordobés resumió en una frase lo que representa la figura del ex funcionario. “Hoy sacarte una foto con Jaime es firmar un certificado de defunción política”.
Por ahora el futuro de Jaime es incierto, la Justicia determinará si el otrora poderoso funcionario seguirá disfrutando de su libertad o deberá pasar algunos años tras las rejas.